miércoles, 23 de julio de 2008

Encuentro interior

Resto importancia a lo que haces, a lo que dices, a lo que esperas de mí, y me vuelvo un bobo con relevancias sin espacio y sin tiempo, en la búsqueda de algo que me saque de la rutina atroz que me bombardea sin piedad. Quito las dobleces que me vuelven más estúpido. Ya no quiero perder el tiempo. Me he endeudado conmigo mismo; y no quiero seguir por un itinerario que no ofrece bendiciones y vida. Sí, estoy preocupado: no puedo ni debo decir otra cosa. No obstante, mi fijación ahora es y ha de ser el apartarme de todo lo que haga ruido. Debo generarme un coraje que me invite a proseguir con el ánimo bien alto y con las perspectivas siempre en misión salvadora. He de ser el primero para ayudar al primero, y he de ser el último para experimentar lo que es no tener suerte. Intentaré ser una persona de raza, de cualquier estirpe, bajo cualquier condición, para ayudarte y ayudarme, para que nos encontremos interiormente.

No hay comentarios: