Nos alumbramos con una nueva luna que nos llena de entereza para empezar por ese mundo que nos despertará al fin. Nos hemos contado algunas experiencias que nos enseñan a vivir en la carencia más absoluta y distinguimos a lo lejos con una pasión que alimenta con lo que no puede engordar. Asimilo la vertiente más noble con un espíritu que nos hace seguir por una senda de aficiones y de sanas intenciones que nos harán cuajar una amistad suprema. Yo diré, tu dirás también.
No hay comentarios:
Publicar un comentario