viernes, 6 de febrero de 2015

Instantes de pasión

Me ofrezco a ti en una voluntad enorme que casa con las noches en las que nos movemos con una altitud que mira que se halla donde debe.

Somos en la otra noche que anima con una exclamación poderosa. No neguemos la vida. Seamos. Nos hemos de alzar.

La memoria nos debe conducir por los caminos de unos seres callados, silentes. Nos damos lo enorme. Nos hemos insistido.

Todo podrá estar donde es necesario. Nos hemos de aclamar con una sensación ideal. Nos pondremos en el punto más creíble.

Nos debemos dar lo justo. Nos necesitamos. Hemos sido. Nos acostumbramos. Hemos sellado los instantes de pasión.

Juan TOMÁS FRUTOS.

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