Existes,
y me regalas felicidad.
Te has convertido en el eje
de una vida que no se marchita
gracias al amor, al tuyo, a ti;
y así será mientras estés
en ese lado que es centro.
Me regalas una dicha
expuesta a la superación
de cualquier envite.
Tus palabras sanan
sin aspectos gratuitos.
No hay mayor fortuna
que la que no se puede valorar.
La tuya es una de ellas,
ahora la más importante.
Será bueno,
o eso me digo, de verdad,
mientras este momento dure.
Existes: ¡Qué bueno!
Juan T.
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1 comentario:
Fíjate tu con que poco, has coloreado un rutinario miércoles.
Preciosa de principio a fin, coronada, calada, hermosa...genial.
Hala, me la llevo, que mi gente no se acostumbra al enlace, tendremos que darle tiempo, ea.
Feliz día...luce.
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