viernes, 25 de julio de 2008

En busca de una nube

No estamos de acuerdo en nada, y no porque no lo estemos, sino porque acabamos en la nada: eso es. Negocio sin nadie, y así sigo: harto de un vino que pincha en la garganta y que me rompe la vida en mil añicos. La victoria me entorpece. Lo mejor que me puede suceder es que te vayas. El resto ofende.

.................

El pronóstico es reservado. Todo me atañe cuando hablamos de ti, y me digo a mí mismo que en el juego quedamos comprometidos para la nada, que es lo que nos toca por desgracia. Me ubico mal.

.................

Trasladas tus pensamientos, y nos quedamos en una nube gris con aspiraciones al color azul. No será. Se resisten mis deseos.

No hay comentarios: