miércoles, 22 de octubre de 2008
Cálculos mortificados
Te he dicho que te amo, y sé que te hallaré al final del tiempo. .... Me consientes una duda, quizá dos. Nada es eterno. Lo sé. .... Apuntas todo lo que sientes con una mirada que traspasa cualquier obstáculo. .... Te encuentro en ese mundo que es lugar para todos. .... Tenemos la oportunidad que discurre con sentimientos profundos. .... No te puedo escuchar en la distancia con reflejos que nos alteran. .... Hemos iniciado esa relación estupenda que nos quita determinaciones inmaculadas. .... No estamos para aplomarnos entre conexiones y desconciertos. .... Hemos vivido de consejos que nos atacan con mucho empuje. .... Desarrollamos algunas fricciones que lograrán limar las tensiones. .... Trabajamos para atender y entender los buenos romances. .... Vamos a una velocidad de crucero que nos mantiene con permisos y suposiciones. .... No podemos garantizar nada de valor, y por eso me ubico entre tus calores pasionales. .... Nos vamos a esa bahía que nos cuela a través del tiempo. Nadie me dijo que sería así. .... Emigramos en busca de besos y de abrazos que apuestan por la felicidad. .... No me ofreces la realidad de un cariño que baja con aprecio. .... No hay posibilidad de abstinencia cuando hablamos de amor hermoso. .... Estamos en la contradicción, con un poco de la nada y en la impotencia. Resumimos lo más destacado, que no es lo más querido. .... Nos insertamos en una máxima que nos toca el punto más sensible. .... Marcamos las sorpresas con unas posiciones que nos dominan entre ascendencias. .... Nos dirigimos a un nuevo inicio con derrumbes que nos ocultan. .... Vamos en esa ambulancia a la que le falta oficio. No podemos encarar el futuro. .... Debatimos la apertura y el cierre con una responsabilidad que nos aclara el camino de la perfección. .... Surgen algunas promesas que nos dan un poco de valor. .... Nos riegan con estados de opinión que nos cubren de sabiduría. .... Estamos ocultos sin querer; y somos pequeños sin medidas. .... El amor reclama una regla que nos amolde al sentido de la reforma amorosa. .... Nos personamos para querernos más sencillamente. Estamos en el sentido contrario. .... Suscribimos un pacto que modifica y mortifica los cálculos.
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