sábado, 31 de julio de 2010

Nos marcharemos

Para mí eres todo. Nos hemos enseñado a vivir. Las voluntades son en otras etapas. Nos marcharemos.

Visiones generosas

Todo nos parece de alguna manera que nos permite lo que será en la nueva noche que nos proporciona visiones generosas.

Por lo que me regalas

Resolvemos lo que somos, lo que nos ayudará. Las estrellas nos llegan. La vida es en ti, por lo que me regalas.

Lo que deseo

Eres todo lo que deseo. La vida nos ha sonreído con sus invitaciones sorprendentes. Nos agasajamos.

Busco

Te busco. Doy con ese enamoramiento que me propone seguimientos sin sucedáneos. Nos ponemos sin guardias. Me conviertes.

Con anuncios supuestos

Te iré a ver cuando la vida nos entregue sus mejores fines. Nos haremos propósitos con anuncios supuestos.

Brilla la vida

Estamos en esa onda que nos mueve hacia lo más bonito. Eres ese amor en el que confío. La vida brilla.

Otras imaginaciones

Consideramos la suerte como una baza que nos ha de proteger. Lo sucinto nos invita a pensar. Nos plantearemos otras imaginaciones.

Las de siempre

Nos hemos estancado con lo que sentimos. Hemos vuelto a varias etapas anteriores que parecen las de siempre.

Todo lo que siento

Te quiero con razones y sin ellas. Tuve suerte el día que di contigo. Procuraré no defraudar. No descifraré todo lo que siento.

De sensaciones

Te prometo un amor que llega libre y libre se irá hacia ninguna parte. Hablamos de sensaciones.

Los deseos que llevamos dentro

Nos hacemos caso. Hemos consultado las visiones con las que nos movemos. Herimos los deseos que llevamos dentro. Te recuerdo.

Vayamos por la comunicación

La comunicación es la gran divisa. Ha de ser la bandera con la que caminemos. Veamos la vida en etapas, en fases, en momentos, en deseos entremezclados con opiniones definidas. Debemos tener claras aspiraciones: una de ellas es la de comunicar, y hacerlo bien. Deambulamos por este maravilloso mundo, lleno de agridulces elementos, con sus consecuencias variopintas y con sus perspectivas de amplia gama. De vez en cuando, además de mirar, vemos, y caemos en la cuenta de esa hermosura sobre la que teorizamos y que observamos y palpamos en primera línea en cuando le damos una clara oportunidad. Es, pues, cuestión de intentarlo.
Los apuros de ciertas etapas (inevitables, por otro lado) se suspenden por unos instantes cuando damos con la complicidad que nos hace sentirnos con más vida. Nos manifestamos recurrentemente, o debemos, con unas actuaciones que nos dan fe a través de ciertas actividades que nos impulsan para seguir adelante propiciando y sacando partido a la existencia. Nos acercamos a algunas justificaciones cuando nos preparamos, cuando estamos preparados, para ello.
El esfuerzo de la mirada es básico para que nos regalemos la realidad del otro, de los demás, para que entendamos que todos tenemos una función, y que ésta es digna y competente cuando nos mueve la intención buena, la buena intención.
El verano es una etapa oportuna para enfrascarnos en un determinado relajo que nos ayude a contemplar de verdad, con más propiedad, con el afán de ver al otro lado, de reconocer y de reconocernos con las experiencias que nos toca exprimir, que así ha de ser.
Tomemos, por lo tanto, cartas en los asuntos que nos envuelven y que nos llevan como si constituyeran un río tras una tormenta con aguas encabritadas, y concedámonos el beneficio de una existencia que tiene sentido verdadero con la belleza de quienes nos acompañan. Seamos en el servicio a los convecinos.
Por eso, las miradas que propiciemos han de ser limpias, cargadas de confianza, procurando que ayude el contexto, que haya una retroalimentación (esto es, una respuesta), que nos impulsen a la actividad del entendimiento y de la comprensión, con aquiescencia, buscando el valor del silencio y de la escucha, con proporciones equitativas y equidistantes. Con todo ello tendremos la necesaria complicidad, a la cual hemos de añadir los mejores ánimos que, con su ilusión consustancial, nos regalarán buenos presentes en busca incluso de un futuro aún mejor.
Quizá el verano, y puede incluso que tengamos que quitar el quizá, sí, el verano, con todo su ocio, con esa parada en la biología profesional, sea, es, una etapa para fomentar auténticas miradas, de ésas que divisan y advierten, que otean en el interior y que sacan lo óptimo de cada cual. A eso se le llama entrega (complicidad decíamos antes), o, en términos más comunicativos, empatía. No olvidemos que, sin ella, sin asumir quién es el otro, sin sus porqués y circunstancias, sin esa actitud de ponernos en su lugar, no hay verdadera comunicación, y a ella, como no puede ser de otra manera, debemos aspirar. El intento ha de ser constante, permanente, vehiculado con la mejor intención. El verano es una etapa adecuada. Supongo que el resto del año también. Vayamos por él. La comunicación, con toda su grandeza, nos espera como el baluarte más preciado.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Nos sacrificamos

Meditamos en torno a lo que podemos ser. Nos recordamos. La vida nos quita y nos da. Nos sacrificamos por amor.

Previsiones silentes

Hemos aprendido de las voluntades con unas reseñas que nos singularizan con las previsiones silentes.

Caminatas

Nos ensanchamos con unas imágenes que nos regalan amores que profundizan. Nos damos una noche nueva. Las caminatas no nos cansan.

Con el amor

Tanteamos la vida con una voluntad que nos previene con sus nocturnas caricias. Nos insistimos con el amor.

Versiones irreales

Hemos planteado qué hacer en las olas de unas noches que nos ocultan con versiones irreales.

La noche llega

Nos damos ese elemento que nos complace. Hemos imaginado cómo volver. Las ideas son. La noche llega.

Nos rodea

Seguimos ese movimiento que nos gusta con entornos muy virtuales. No podemos quedarnos al lado. La esquina nos rodea.

Sin influencias

Ideamos esa marcha que se mezcla con las posibilidades de una existencia con vectores sin influencias.

No te esperaré

Vivimos como superior dicha que nos reparte intenciones con valores relativos. No te esperaré.

Nos curten

Agarramos la vida con imágenes que nos curten. No podemos esperar milagros que aparecen sin hilos conductores.

En lo cercano

Vigilemos ese entorno que nos gusta con lo más interesante. Nos realizamos con conveniencias que se proyectan en lo cercano.

Apremio de antaño

Te espero con una necesidad que me pone en el equipo fácil. No hemos vivido el apremio de antaño.

Donde nos dicen

Tendremos que hablar de una visión modificada con unas señales de palabras huecas. No iremos donde nos dicen.

Celestes miradas

Transformamos la realidad con una voluntad que nos suena a música con sus celestes miradas.

Vivir con las mejores ideas

Nos impartimos las mejores ideas con sinceridades que nos hacen vivir en otras historias.

Implicaciones nuevas

Estás en un lugar perfecto, con raíces profundas que nos gustan con implicaciones nuevas.

Lo que nos necesitamos

Creamos. Somos entre avanzadillas que muestran todo lo que somos, lo que pensamos, lo que nos necesitamos.

lunes, 26 de julio de 2010

Agotan las contemplaciones

Vehiculamos unos orígenes que son en las noches con techumbres. No podemos menos. Tampoco miremos más. Las contemplaciones agotan.

Tono más adecuado

Todo es en un sueño que nos proporciona asuntos que serán cambios con un tono más adecuado.

Una transformación

Me asusta pensar que todo se agota: creo que es más acertado hablar de una transformación.

Apreciemos lo que tenemos

Todo tendrá que ser ahora que las interpretaciones nos han llevado al uso sin costumbre. Apreciemos lo que tenemos.

En medio de la nada

Me atemorizas con esas señales que me quitan del camino que estuvo en medio de la misma nada.

No será igual

Aterrizamos en un lugar donde pasamos muchos años. Vemos que no fue un sueño, pero también sabemos que ya no será igual.

Estar bien, estar mejor

Damos lecciones con unas fórmulas que consideramos especiales. Tendremos que estar bien, incluso mejor.

Para que se multiplique

Planteamos la vida como una suerte de amor que hemos de lanzar al firmamento para que se multiplique.

Situamos las razones

Me haces ir por la buena senda. Nos hemos aconsejado estar de un lado y de otro. Situamos las razones.

En otra esfera

Subimos a ese mundo que nos coarta en las realizaciones más sanas. Nos debemos en otra esfera.

Por buenos sitios

Nos enamoramos cada día de la Luna, y ésta nos sonríe hasta que llegue una nueva estela que nos conduzca por buenos sitios.

domingo, 25 de julio de 2010

Plasmemos sentimientos coherentes

Planteemos y plasmemos lo que somos y lo que pretendemos sin demoras que no nos sirven para nada. Conjuntemos experiencias y saquemos provecho a todas ellas. Merece la pena. Vivimos buscando las independencias que nos reconocen con unos gustos que podrían ser extremos. Persigamos esos puntos intermedios que nos han de ubicar en los puntos más gratificantes. Nos hemos de poner entre claridades que nos deben contar las raíces con sus baños de aguas moderadas en sus temperaturas. Tengamos prudencia y paciencia para que la tranquilidad reine. Nos debemos aconsejar unas posibilidades que hemos de instalar en las causas más lindas. Multipliquemos las estimaciones para dar con los instantes menos fugaces. Vivimos. Vivamos también.
Hemos de considerar lo que ocurre con una amistad que debemos procurar con alojos de pensamientos en el puro vacío. No presentemos consideraciones extrañas. Hemos de abundar desde el inicio de cada proceso en las posiciones sin plazos. Nos remitimos a nosotros mismos a estados de secuenciados sosiegos que no piensan en ese segundo fantástico de una ayuda tras otra. Nos sentimos consternados por las ansias que no se plasman en una cierta tranquilidad. Nos debemos consolar con el cambio de tercios. Pensemos.
Las consideraciones nos ofuscan. Nos complacería dar con las voluntades que antes nos dijeron que todo iría bien. Seguramente nos faltó convicción. Hemos de recuperar los encantos cruciales con fuerzas y con velocidades adecuadas. Repartamos el juego sin más límite que lo aceptable. Nos cruzamos sin dar con las situaciones suficientemente analizadas. No podemos con el todo. Nos hemos de convocar.
Nos expresan afectaciones que son pérdidas en los finales que nos arrebatan las conclusiones más lindas. Reforcemos los estadios que son figuraciones de intermitencias que se mezclan con las astucias que señalan los puntos del aprendizaje en el respeto más abierto. Adoptemos aquellas acciones que nos saquen del hastío y del cansancio que nos quitan las recetas ante los problemas que nos apartan de las direcciones que otras veces tomamos. Nos ponemos en forma para estar preparados ante lo que se pueda necesitar. Se avecina lo bueno.
Echemos ingredientes a la misma salsa de la vida, que nos consulta las partes con sus denominaciones de orígenes que sufren las adicciones con unos panes que nos liberan de todos los males que son en las noches más cortas. Nos preparamos para superar los elementos que podrían ser contrarios. Nos llevamos bien las cuentas. Conducimos nuestras existencias estupendamente contando lo que hemos conocido y compartiendo las docencias que suponen un sustento y unos platos de sabiduría variopinta. Oímos lo que nos cuentan, y hasta empezamos a analizarlo. También contamos. La existencia es un compendio de independencias y de narraciones. Prediquemos con la voluntad de dejar constancia de los beneficios del aprendizaje. Puede ser un buen punto de comienzo diario.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Los beneficios del encanto comunicativo

La magia de la cortesía, de la educación, de actuar con encanto en las relaciones humanas se traduce en resultados estupendos. La comunicación precisa de una interacción más o menos intensa y elaborada. Intentemos andar el camino comunicativo con el corazón teniendo en cuenta lo que piensan y anhelan los demás. Llevemos un papel con los deseos que han de aceptarnos como somos. Pongamos los resultados que hemos diseñado con acuerdos bendecidos por las buenas miradas. Las habilidades se resumirán en una serie de gestos con los que nos pediremos las mejores caricias comunicativas. Expongamos lo que hemos reflexionado y puntuemos en lo solvente.
Aprendamos con los pronósticos sin reservas inútiles. Busquemos instrumentos de poderes. Nos hemos de hacer caso. Gobernemos nuestros aprendizajes sin rubor. Hemos de repasar todo lo que ha quedado en diversos cajones: lo hemos de practicar dentro del marco de la recuperación de esas aficiones más modernas. Nos queremos con medidas sanadoras.
Nos debemos otorgar beneficios con encantos graciosos. Nos hemos de enamorar de todo lo que hacemos. Vayamos y digamos con el mejor fin. Hemos de pender de porcentajes con solubles conjuntos.
No congelemos los pensamientos. Charlemos de lo que llevamos en las mentes y en los corazones y ajustemos en lo fundamental. Leamos esos libros que tanto nos complacen. Hemos de gustar con normas sin suposiciones. No ha de pasar de largo ese carrusel de ideas que hemos ido cosechando.
Nos interesa la felicidad, pues con ella andamos más y más lejos. No fastidiemos todas las ocasiones que tenemos en el escenario que hemos de manejar con picardía y relevantes objetivos. Centremos las estrategias que han de tratar de los convenios comunicativos que nos han de dar alas para volar cerca y lejos. Tenemos muchas posibilidades.
Encontraremos lo escaso. La vida es. Hemos tomado muchas notas que nos contrastan multitud de pareceres. Nos daremos tiempo, que es lo más escaso. Nos explicaremos todo lo que hacemos, aquello que fue abordaje con sus consecuencias y todo lo demás. Las reacciones nos han de provocar impulsos con pretensiones renovadas. Nos consolidaremos en los nuevos encuentros. Los calendarios nos darán faenas con sus eventos propios. Hablemos durante mucho tiempo. Será bueno.
Consultemos lo que nos apetece hacer con claridades relativas. Nos queremos, y eso ha de ser el punto de enganche para reiterar el fin de poder funcionar en mancomunidad. Reformemos un poco los beneficios individuales para que se muestren en colectividad, con gozo. Muchas cosas son necesarias para ganarnos ese respeto que será arreglo en la parte más hermosa. Nos hemos de brindar un poco de tiempo para recuperar las idóneas conclusiones. Discutamos con moderación y templanza. Más que eso: debatamos en el deseo de aprender y de compartir lo que hemos conocido. Movernos con encanto, en su búsqueda, en el afán de fomentarlo, nos conduce a unos estadios maravillosos. Probemos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Despertar con la comunicación

Surgimos cada día con un quehacer que es fruto de las versiones con las que recorremos cada jornada. La experiencia es un paso que, bien utilizado, nos hace ganar tiempo y ahorrar muchos problemas y desasosiegos. Surgen las brumas con sus intereses más o menos conocidos, con sus consideraciones que superan el papel de las bromas. Seguimos planteando una voluntad que es estela entre libertades que nos harán construir una realidad de distingos contrarios, que son, al mismo tiempo, puros complementos con los que hemos de aderezar las valentías con las que nos unimos, o bien nos uniremos, a las imágenes que nos sorprenden. No podemos verlo todo, ni tampoco será lo más conveniente.
Nos mostramos aguerridos ante los personajes que nos pueden con sus versiones más o menos estimadas. Hemos supuesto un sí que nos invita a aterrizar con unas conspiraciones bondadosas. Las aventuras no deben quedar en nada. No podemos asumir esfuerzos que nos dejen con los resultados nulos. Nada de lo que hacemos debe quedar en vano. Los baluartes a los que debemos aferrarnos han de ser frutos de los empeños y de los esfuerzos más o menos tranquilos. Nos hemos de calmar todos los días con unos objetivos interesantes.
Las premisas de lo que debemos hacer nos han de realizar con sus consideraciones sin huecos. Nos debemos entregar a proposiciones de protecciones curiosas con las que animarnos en el día a día. No podemos quedar rezagados. Nos sentimos en plenitud cada jornada. No tomemos el tiempo entre negaciones del valor de la experiencia. Comuniquemos los fines con los que poder crecer espiritualmente. Nos hemos de poner a apostar con el fin de dar un poco de fuerza a los toques señalizados desde los instantes más previsibles y defendibles.
Las brumas de los flujos de la comunicación podrán intentar cercenar lo que somos y lo que tenemos, pero la gran firmeza ha de venir del lado de la misión con la que incrementaremos las visiones con las que estaremos en manos de posturas serenas. No nos bajemos de las cercanías que nos posibilitarán con calores que anticiparán las tormentas que nos traerán nuevas ideas con preferencias de cariños gestados para ser dichosos. No dejemos que lo peor nos pueda. Los ánimos nos influyen, y han de hacerlo sin intensidades que rompan. Las excepciones existen.
Lo impresionante nos ha de servir para inundarnos de las mejores ocasiones para despertarnos a una nueva realidad que nos distancie de las demoras. No clausuremos las opciones que han de confirmar que todo puede ser. Nos ponemos a celebrar lo que es triunfo querido, o ha de serlo. Revisemos lo que somos, lo que poseemos y demos con las amistades que nos cuentan con seguidos puntos que nos encadenan a las razones más puestas. Nos debemos enseñar el sí. El mejor homenaje que nos podemos dar es creer en soluciones que nos han de propiciar tonos amables y estupendos. Aclaremos lo que portamos en el interior disipando las dudas y las brumas con las que nos cargan quienes no nos quieren tanto como dicen. La memoria nos necesita. Emplearla en comunicación es una baza crucial para un nivel de bienestar que ha de venir, precisamente, de y por evitar errores anteriores y de optimizar lo poco o lo mucho que tenemos y que hemos aprendido. Sacar provecho a cada amanecer con el factor sorpresa indemne supone un sustento ideal para el equilibrio y la dicha.

Juan TOMÁS FRUTOS.

En la maleza

Nos quedamos cortos en un amor que nos debería hacer formar parte de un tesoro que descubrimos entre la maleza.

Comenzar sin pretensiones

Todo asciende con pretextos que nos hacen vivir entre vueltas a comenzar sin pretensiones.

Lugares que no son

El río nos lleva con otro viaje, con otros resúmenes, con osadías que nos incluyen en lugares que no son.

Inicios que nos olvidan

Reconozco tus honores con unas voluntades que son todo y poco. Nos destacamos con inicios que nos olvidan.

Lo superaremos con mimo

Eres ese instante alado que me lleva a donde siempre soñé. Nos hemos quedado con un cierto temor que superaremos con mucho mimo.

Volveremos a estar

Bendices mi vida con buenos propósitos que me rescatan en los momentos más cómplices. No te veo como antes. Volveremos a estar.

Cuando empezábamos

Seguimos por deseos que nos dan las tranquilidades que nos unieron cuando estábamos empezando.

Menesteres lindos

Todo me sabe a tus gozos en momentos de puras sonrisas que nos aplauden con sus menesteres más lindos.

Noches interminables

Nos miramos en este verano que nos complace con sus calores y sus noches interminables.

Para los que nos quieren

Tenemos que sacar esos deseos que hemos de convertir en fines para todos lo que nos quieren.

Consejos que dar

Resolvemos algunas dudas con todas sus posibilidades. Nos quedan muchos consejos que dar.

Con buenas intenciones

Te agradezco las prédicas en las que nos ennoblecemos con buenos consejos. Nos diremos otro sí con buenas intenciones.

A entendernos

Eres la meta y el camino con todas las consideraciones que me pueden hacer feliz. Nos animamos a entendernos ahora y siempre.

Consejos renovados

Retrocemos en un tiempo que nos incluye en lugares inhóspitos. No daremos con todas las indicaciones. Nos iremos entre consejos renovados.

Con los mejores sentimientos

Representamos las intenciones que nos gustan con sus señales de amistades que nos multiplican con los mejores sentimientos.

Nombres animados

Nos hemos puesto a laborar en una voluntad que va y que viene con sus nombres más animados.

Los elementos de antaño

Razonamos con acompañamientos que nos conducen por vericuetos que no nos permiten ver por los elementos de antaño.

La vida nos corrige

Hemos tomado en consideración un amor que nos complace. Nos animamos. Hemos sido en otra plaza. La vida nos corrige.

Será más tarde

Faltamos a esa cita en la que antes éramos invitados justos. Nos quedamos sin amor. Nos realizaremos. Será más tarde.

Sin muchos anhelos

Eres mi gran formato, mi gran complemento, mi apoyo para ser feliz sin muchos anhelos preclaros.

Los cuentos que vemos

Todo es en la noche que es resultante de todo lo que nos queremos. Nos aleccionamos. Damos cuentos en los que nos vemos.

Mi acción

Nos escapamos. Dejamos atrás esos sentimientos con los que nos encontraremos más adelante. Eres mi acción.

Lo justo, sin excesos

Nos animamos en este nuevo día que nos pertenece con respuestas que nos anunciarán casi todo lo que nos conviene, que es poco, que es lo justo, sin excesos.

Multiplicar el amor

Leemos lo que nos define como parejas responsables de un amor que hemos de multiplicar.

Los buenos encuentros

Nos enseñamos a descubrir. Nos damos interrogantes que nos harán hablar desde la magnificencia de los buenos encuentros.

Métodos reales

Buscamos lo espontáneo. Nos llegan las circunstancias. Nos descubrimos con métodos reales.

Mi campo gravitatorio

Eres un universo de sensaciones. Nos investimos de unidades con abrazos enormes. Eres mi campo gravitatorio.

Cada vez mejor

Eres mi quintaesencia. Nos manifestamos. Hemos querido, y seguiremos. Nos relacionamos cada vez mejor.

viernes, 23 de julio de 2010

No cerremos los libros

Estimulas mi imaginación con una serenidad que me provoca ansias de libertad. Nos tenemos para lo que sea menester. No cerremos los libros existenciales.

Sin valoraciones acertadas

Hemos dejado que las heridas sanen de cualquier modo, y de cualquier modo han llegado a un umbral sin valoraciones acertadas.

Ciertas esencias

Nos sentimos en una especie de comunidad sin vecinos, que hemos de poner para que no falten ciertas esencias.

Mediar en nosotros

Nos vencemos en mitad de un camino que no termina de ver las sensaciones que podrían mediar en nosotros.

Vacíos existenciales

Tiemblo ante ese tipo de emociones que me hace liderar las causas con sus claros vacíos existenciales.

Gustos en otro lugar

Nos sinceramos en la controversia que nos predispone con sus gustos más extremos. Nos hemos asomado a otro lugar. Veremos lo que nos conviene.

En la noche y en el día

Nos ofuscamos dando cuenta de las raices de algunos problemas, que son en la noche y en el día.

En su momento

Enlazo con todo mi ser en ti, y me pregunto por las respuestas que no sabemos darnos. Las ofreceremos en su momento.

Las condiciones que nos tocan

Nos hemos divertido en el pasado, pero ahora toca afrontar el presente con el tiempo y las condiciones que nos tocan.

Muy simpáticos

Nos vamos a preparar para dar con las astucias de otros momentos sinceros. Nos mostramos muy simpáticos. Seguiremos.

Aquellas virtudes

Me corriges con visualizaciones con cuestiones en interrogante. No daremos con las virtudes de cuando empezamos. Aquellas...

No lo que ocurre

Apaciguamos los corazones, que vienen con sones que nos parecen especiales. No vemos lo que ocurre.

Nos distrae

Asustas a mis intereses, que quise que fueran los tuyos. Volveremos a no empezar. La vida nos distrae.

En lo que me ofreces

Me atrapas en lo que eres, en todo lo que tienes, en las razones nuevas, en las antiguas, en todo cuanto me ofreces.

En la espera eterna

Te añoro en aquella noche, desde entonces, en la espera eterna a la que nos hemos condenado.

Consolidar anhelos

Me cautivas con esas contemplaciones que me envuelven de buenos anhelos, que vamos a consolidar.

jueves, 22 de julio de 2010

Con estelas

Te quiero como eres, por lo que eres, por tu comportamiento divino, con estelas en el mar.

Destreza medio nueva

Me destacas todo lo que soy, lo que pienso, lo que me dejas sentir en una destreza medio nueva.

Observar quién soy

Respeto lo que me dices ahora que no me dices casi nada. Vuelvo para observar quién soy.

Las consecuencias que me ofreces

Me ayudas, te ayudo, sigo, me dispongo, me atraes, respondo, y soy con todas las consecuencias que me ofreces.

Tendré que verte

Termino de verte en una distancia que me aflige. No saltamos esos anhelos. Tendré que verte.

Vencemos el pudor

No me digas que puede ser, que aún no sé si lo será. La vida nos hace transigir. Vencemos el pudor.

Confundidos para amar más

Miramos el vértice que nos complace, que nos gusta, que nos pone en tela de juicio. Nos confundimos para amarnos más.

Anhelos y gratificaciones

Corrijo mis formas con intenciones primeras y últimas. Tumbamos los anhelos con gratificaciones que suscitan lo mejor.

Olvidados

Te expreso mis convicciones de amor que nos llevarán tan lejos como queramos. Nos sentimos olvidados.

miércoles, 21 de julio de 2010

Disposición correcta

Nos decimos que el amor lo puede todo, y seguramente es así cuando la disposición es la correcta.

Bonitas estructuras comunicativas

Hagamos una estructura bondadosa y loable, noble, con impresiones compartidas en positivo. Persigamos la belleza, sí, ésa que consideramos serena, útil, sencilla incluso. Hermosean las situaciones que nos ponen en unos bretes de apaños singulares. Prestemos atención, cada vez que podamos, a cuanto ocurre y no dejemos que las norias nos olviden en lugares extraños. Mantengamos la moral en los lugares que auspician los instantes más estimados y queridos, que han de ser, que hemos de ser con ellos, que serán. No dejemos que la gloria nos olvide en instantes de apetencias sin dádivas amorosas, que deben mantener las causas que nos previenen con sus ángulos más o menos bendecidos. Nos hemos de preparar para la gran razón, con sus dudas y enigmas, que siempre nos han de atemorizar.
Los aspectos más simpáticos nos han de presentar las creencias con sus envoltorios más sinceros. No hagamos caso únicamente a los corazones que se rompen con sus promesas de todos los colores. No descansamos, como deberíamos, en los trayectos, pero sí cuando nos acercamos a los finales que nos previenen con sus torpezas más o menos aclamadas. La fiesta nos regala la paz de unos encuentros que tienen sus miradas de principio y de fin, y con ellas, claro que sí, hemos de navegar hacia tierras conocidas. No pongamos travesaños en el camino, que éste ha de prevenir y de curar con mantenimientos periódicos de señales con identidades variadas.
Nos sentamos a las diestras de estructuras con las que crecimos que, con tranquilidad, hemos de cambiar para que se subsanen las medidas que otros pusieron. La dinámica es ésta. Nos hemos de agradar con sus superaciones de baches que nos regalaron en su día heridas que otros ocultaron con esperas sin la suficiente fe. Hemos previsto algunos arreglos, de ésos que parecen provisionales y acaban siendo vidas entregadas a condiciones consolidadas. Nos debemos poner en situación de poder superar lo que nos oprime, que es un aspecto sencillo pero atrevido a la vez. Frustramos todo, y todo es en la otra cara de una vida con secuencias extraordinarias.
No mantengamos la paz de unos ancestros que nos predisponen con aquellas singularidades que subrayan hacia dónde nos queremos ir. Nos hemos de poner en esas nuevas marchas que nos ubican donde deseamos estar; y así estaremos, y nos pondremos con unas consideraciones de aplicaciones variadas. Iremos a tomarnos ese elixir de apetencias supremas que nos sacarán de un amor y nos podrán en otros asuntos con los que aumentar los instantes de puras gratificaciones en calma.
La existencia humana nos regala preferencias y deseos con unos volúmenes hermosos de ciertas ideas que corrigen hacia dónde marchar cuando las causas nos olvidan. Hemos tocado esa flora inmensa de conspiraciones hacia la gran obra que es cariño y pasión en estado puro. Nos tenemos, y eso nos basta para la felicidad que deseamos plantar. Vayamos hacia otro lugar. Las querencias nos ponen en un vaso vacío. Lo hemos de llenar con toda la certeza del amor basado y soportado en la misma comunicación. La hermosura, la belleza, las intenciones más bondadosas nos deben regalar momentos que no nos condicionen. Lejos de eso, hemos de procurar un rato, un buen rato, de felicidad. Ésta surge por capricho, pero también se hace a través de un sacrificio voluntario y sin dolores innecesarios.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Construir comunicación y buenas situaciones

La comunicación nos da solvencia, nos pone muchos remedios, contribuye al buen hacer y al buen estar. Lo óptimo depende, en cierta medida, en una gran medida, de nosotros, de nuestras actitudes e interpretaciones. Nos dedicamos cada jornada a analizar las cuestiones que nos rodean con una promisión de figuraciones que han de superar la antesala del rumor. Nos hemos consolidado como esa parte que, siendo casi como el todo, nos hace evolucionar hacia las sensaciones más maravillosas. Gustemos con unas promesas convertidas en realidades densas, estimadas, únicas. No pasemos por alto lo que ha de ser prestación de singularidades.

Nos queremos por lo que somos en un estado de una cuestión simpática que nos ha de alegrar cada día de nuestras vidas. Nos ponemos en marcha en cuanto puede ser, sin que tengamos más prisa de la debida. Debemos afrontar las cuestiones tal y como vienen, dando fuerza, aprovechando las vacilaciones que nos analizan con sus bromas en serio. No apaguemos, por favor, los fuegos que podrían darnos una voluntad extraordinaria. Nos hemos de hacer presentir para que la conexión se dé. No nos ceguemos en la inutilidad. Podemos continuar, y creo que casi debemos hacerlo.

No limemos inútiles asperezas, y tengamos tiempo para lo verdaderamente importante, que siempre tiene relación con la salud y con el amor. La una y el otro nos pueden hacer fuertes, y nos permiten aguantar el tirón cuando las cosas no van tan bien como nos gustaría. Nos planteamos proseguir a menudo por los derroteros de una existencia compleja, que no complicada. Hagamos caso al corazón, que es siempre una buena guía interior y exterior. Las necesidades nos deben invitar a proceder por los vericuetos que nos marcan algunas distancias.

No nos embarquemos en norias que defraudan y frustran los momentos más estelares. Nos hemos de aplicar algunos cuentos que nos regalarán moralejas con las que unirnos a causas que no debemos perder. Las intromisiones en aspectos áridos nos han de servir para darnos unas mayores fortalezas. Nos ensamblaremos con esas amistades que nos nutrirán de gustos sinceros. Lo extraordinario nos conduce por construcciones que no debemos dejar que caigan.

Desarrollemos las casuísticas con unas aspiraciones contrastadas, duras y flexibles al tiempo, con las improntas en las raíces de un sistema que hemos de blindar para que nada falle. No pongamos obstáculos debajo de las ruedas imaginadas de la vida, que no tiene tantas ocasiones como nos gustaría, aunque no olvidemos que siempre hay una segunda oportunidad en caso de fracaso o de error. Las inspiraciones contribuyen a las ilusiones y a dar con la suficiente creatividad, pero también nos hemos de preparar para dar con las verdades que entusiasman en base al sacrificio y a la entrega en el aprendizaje. Hoy es un buen día para que comuniquemos. Sea realidad. El empeño ha de estar presente desde el mismo amanecer, y también la convicción. Es verdad que hay una conexión entre la comunicación bien entendida y las buenas situaciones.

Juan TOMÁS FRUTOS.

El milagro de la confianza

Hasta las montañas se mueven cuando tenemos la convicción y la fe, ya sea religiosa o civil, de caminar hacia delante. Ante la redundancia, que nos distancia comunicativamente, nos debemos armar de valor y tomar un poco de tiempo para el análisis. Nos damos, de vez en cuando, un baño por las sendas de los actos humanos. Es bueno, y hasta necesario. Salimos a la calle o nos detenemos ante la pantalla del televisor, o bien, por determinadas circunstancias, nos acercamos por servicios de urgencias u hospitales. Vemos señas de auténtica divinidad y de un tremendo fiasco. Hay de todo. Hallamos a los que la vida les ha hecho sufrir en exceso y a aquellos otros entregados a un voluntarismo a prueba de bombas.
Es la contradicción de la vida misma. Somos capaces de lo más duro, de las más atroces guerras, de conflictos por bienes materiales, por cosas superficiales… Contaminamos el mundo, talamos sus árboles, envenenamos ríos y mares, y procuramos, con más o menos conciencia o inconsciencia, que las especies naturales vayan desapareciendo… Y robamos, y nos maldecimos, y nos rompemos en mil pedazos… Frente a eso hay mucho amor, más, brotando como fuentes incansables ante las mayores ignominias.
Y seguimos. Permitimos el hambre, la extorsión, las enfermedades evitables, los desequilibrios que impiden que muchos millones de seres humanos tengan una infancia. La indignidad por lo evitable o por las situaciones que fomentamos desde el ansia o el egoísmo vive con la complicidad de quienes se han quedado solos de pequeños, de quienes heredan circunstancias que les condenan al fracaso y pese a todo se sobreponen; de aquellos otros que muestran confianza en quienes no la devuelven; de aquellos que todos los días afrontan negocios ruinosos para enfrentarse a la misma coyuntura en la siguiente jornada… Hay gente tan rica interiormente que compensa todo lo malo, que incluso lo supera. Los hay que se miran al espejo y que no se apartan de él hasta que no ven un esbozo de sonrisa, aunque todo parezca indicar que el fracaso les aguarda.
Frente a quienes se levantan cada día prestos a hacer frases incompletas hay algunos, muchos quizá, millones probablemente, que sueñan con una existencia mejor en pos de una misión universal que nos espera con un sentido de hogar. Con ellos tomamos las mieles de sus ilusiones. Ellos no están solos, se rebelan pacíficamente contra las pésimas condiciones, y por eso no nos sentimos en soledad nosotros. Son un milagro, y nos lo trasladan.
Frente a lo que es pérdida, ellos ven posibilidades. Son fuertes en su debilidad. Saben que “querer es poder”, aunque conocen, en su sanador realismo, que la batalla puede estar agotada, sin opciones de éxito. Se levantan, no obstante, por la mañana y se dicen que ése será el gran día, para repetirse, quizá, la misma cantinela una y otra vez. No huyen, y eso les hace héroes. No se les reconoce, no salen en las primeras portadas por triunfos dinerarios o materiales, ni tampoco se les contempla en las primeras planas por sus poderosos cargos o por tener lindos aspectos únicamente en lo externo. No tienen secretos: saben que el que resiste vence. Bueno, no lo saben: lo sienten, y eso les basta.
Cuando nos damos una vuelta por el mundanal ruido, caemos en la cuenta de que son precisamente ellos los que merecen la pena. Cada día les decimos que no hay esperanza, y ellos nos escriben con mayúsculas que siempre la hay. No objetivan, sino “subjetivizan”. Cuando nos proporcionamos un baño de humanidad en el sentido que nos recordaba el filósofo Kierkegaard, los vemos. Lo que debemos intentar es darnos ese baño con ellos. Seguro que nos refrescará mucho la memoria, fundamentalmente aquella tan genuina de la infancia. Tengamos ánimo. Siempre hay esperanza. Si la comunicamos, no lo olvidemos, la multiplicamos hasta la enésima potencia. La confianza, en sí, por sí misma, produce el milagro de solucionar las pequeñas y grandes cosas y seguir adelante.

Juan TOMÁS FRUTOS.

El lado más maravilloso

Tendremos que estar a tono con las circunstancias que nos hacen vivir en el lado más maravilloso de este universo que hemos construido.

Fugazmente

Me sorprendes con todo lo que dices, con aquello que piensas y aireas con normas no escritas. Nos hemos visto fugazmente.

El amor que siento por ti

Te tengo que entender. Es mi obligación, que va pareja a todo el amor que siento por ti.

Me conformas con gracia

Me vales como eres, por lo que dices, con tus intenciones de todo tipo. Me conformas con mucha gracia.

Devolver el tiempo

Tendremos que ir hacia ese momento que es fuerza con acritud simpática. Nos devolveremos mucho tiempo.

Cuentas sentimentales

Tomamos el camino de la tentación en forma de buenas acciones. De ese modo caemos mejor en las cuentas sentimentales.

Lo que nos pasa

Solicitamos un poco de tiempo para entender lo que nos pasa, que es mucho y poco, según se mire.

Nos quedaremos enganchados

Me armo de palabras para decirte todo lo que pienso. Creo que nos quedaremos enganchados.

Tendremos que esperar

Me hace asentir con unas premuras que me consienten con sus toques más o menos mágicos. Tendremos que esperar.

Decir lo que lleva el corazón

Me haces callar ahora que no veo nada que me configure con un cierto valor. No podemos quedarnos sin decir lo que llevamos en el corazón.

No siempre lo comprendemos

Nos hemos preñado de paciencia para poder superar todo cuanto nos ocurre, que no siempre comprendemos.

Actividades estimadas

Deterioramos las intenciones con las mejoras de unas actividades que han de crecer hacia la señal más estimada.

Del modo más conveniente

Disimulas lo que haces con una entereza que nos propone querer del modo que sea más conveniente.

Analizar el amor

Pedimos planteamientos que son sensaciones en unos instantes que nos consienten con sus creencias más o menos sinceras. Tendremos que analizar lo que nos queremos.

Sortear señales

Me tomo ese tiempo que me parece increíble con las voluntades que nos hacen sortear todo género de señales.

Resortes lustrosos

Tendemos a ver, a vivir, a ser, a entender que las cosas nos inclinan con sus resortes más lustrosos.

Nos perdemos

Todo es en la nueva historia que nos sorprende, que nos ama, que nos quiere como somos. Nos perdemos de algún modo.

Contexto determinante

Sorprendemos. La vida es. Nos cansamos. Hemos asumido la existencia con borrados sin cuentas nuevas. Nos regalaremos la suerte de comprendernos con el contexto más determinante.

No todos los significados

Reclamamos un planteamiento que nos haga ser fuertes. Nos denominamos con cariños simples. No daremos todos los significados.

No desaparecen

Vivimos. Las cuestiones nos sugieren qué hacer. Las normas nos dejan ir. Nos mantenemos a nivel. Los amores no desaparecen.

Sin verte en mi entorno

Eres preciosa. No nos vemos, pero experimento tu cercanía hasta sin verte en mi entorno.

No podremos querernos

Sugerimos unas certezas que nos ven con sus pronósticos más estimados. Nos decimos algunas verdades. No podremos querernos.

No todo

No hemos subrayado el último paso. Nos agasajamos. Los ratos pasan. No podremos saber todo.

Un beso virtual

Tendremos que ir hacia la nada para saber por dónde marcha el todo. Nos damos un beso virtual.

Con un cierto arte

Saboreamos lo que nos apetece, lo que nos hace sonreír, lo que nos invita a tomar los mejores momentos con un cierto arte.

Menesteres apetecidos

Hemos sentido las emociones más sinceras. Nos gustamos de verdad. Hemos apetecido otros menesteres.

Tomaremos humor

Tendemos a vernos. Nos hemos dado unos consejos que serán reversibles. Nos tomaremos un poco de buen humor.

Sin compartirlo todo

Hemos señalado lo que es conversión medio automática. Nos entenderemos sin compartirlo todo.

Lo mejor

Somos auténticos. Nos hemos dado una oportunidad que nos sorprende. Nos tomamos en serio lo que es la vida. Eres lo mejor.

Voluntades originales

Hacemos. Nos volcamos en los deseos más tiernos. Nos creamos con voluntades que procuraremos originales.

Gustos extremos

Nos expresamos todo lo mejor que podemos. Hemos totalizado la vida con gustos extremos.

Obra bien colocada

Nos hemos puesto en lo primero y en lo último con diferencias que nos hacen seguir con una obra bien colocada.

No volveremos a cobrarlo

Empiezan los días con los momentos más queridos. Nos hemos dado un finiquito que sabemos que no volveremos a cobrar.

No la hemos optimizado

Equipamos la vida con unas ciertas garantías. Nos sentimos bien con el paso de una etapa que quisimos desde hace tiempo. No la hemos optimizado.

No las apariencias

Eres sencilla, y por eso aprendo de ti. Nos hemos agarrado a lo que nos pensamos. No neguemos las apariencias.

Tardes posibles

Generamos unas renovaciones que nos ponen en unas encrucijadas que nos dan mañanas y tardes posibles.

Nos mostramos

Hablamos de ser, de poder, de seguir. No podemos quedarnos en otros encantos. Nos mostramos.

Sin estrenos

Nos quitamos de ese carril que nos podría enseñar a ser parte de un mundo compartido. Nos hemos quedado sin estrenos.

Robamos ilusiones

Nos podemos poner a compartir en otro momento. Nos daremos ejemplos que serán sueños. Nos robamos ilusiones.

En calma

Nos mostramos precavidos. Hemos encendido las nubes que nos hicieron viajar. Ahorramos en calma.

Iremos

Reiniciamos un sueño con deportividad. Nos queremos. Hemos visto que las inquietudes nos pueden hacer viajar. Iremos.

A lo que fuimos

Ponte en marcha. La vida es. Nos hemos puesto a navegar por cuatro esquinas que nos devuelven a lo que fuimos.

Un mundo que nos gana

Te pido un favor que no escribo, que no pronuncio, que no entiendo, y sigo en la otra cara de un mundo que nos acaba ganando.

A navegar

Reinventamos la vida con una muestra de creencias que nos adecúan para ser objetos sin deseos. Nos ponemos a navegar. Nos pensamos con unas relaciones generosas.

No tan rápidamente

Duele la vida mientras navegamos por sensaciones que nos parecen patéticas. No acabemos tan rápidamente.

Varias estrellas

Me duele esa soledad que nos hemos regalado como el que no quiere la cosa. Nos daremos varias estrellas.

No nos aterremos

Nos hemos convenido siempre. Lo sabes. Nos ha faltado valor para decir lo que es el regalo de la vida. No nos aterremos.

martes, 20 de julio de 2010

No sé si puedo

Te puedo decir todo en esta nueva eternidad que nos conduce con sugerencias nobles. No sé si puedo.

Sombras y luces

Deberíamos decir a todos cuantos vienen que las sombras son luces en días complicados.

Siguen las sorpresas

Prevenimos la vida con todo el entusiasmo del mundo, que nos dice todo lo que podremos hacer. Las sorpresas siguen.

Cada día confundidos

Tendremos que disponer un poco de grandeza con un sentir medio divino. Nos confundimos cada día.

No sé hacia dónde

Vivimos en espacios nuevos que nos sugieren algunas vivencias dispersas. No sé hacia dónde podremos ir.

No en la nada

Echo de menos esos momentos que nos dijeron que sí. Nos hemos puesto a vivir enamorados. No quedemos en la nada.

lunes, 19 de julio de 2010

Amistades fungibles

Adivinamos los empeños que nos prestan las amistades más fungibles. Iremos en pos de otra memoria.

Instantes intangibles

Determinamos posiciones que nos hacen vivir lo posible en los instantes intangibles que nos hablan de querencias.

Reglas que están

Te he dicho que sí, que vale, que todo es en el otro momento de una salida airosa con unas reglas que están.

Internas y externas

Brillamos ante esos aspectos que nos consuelan con inversiones en las consultas que se hacen internas y externas.

No termino de verte

Me miras, y hasta te veo con ese instante de pasión que nos alimentará por siempre. No te termino de ver.

Insistamos con la memoria

Insistimos con los datos de la memoria que nos invita al olvido previsto. No tengamos todas las cartas al fuego.

Con todo el regocijo

Tendremos que estar a la orden de cuatro días y medio para que la semana se complete con todo el regocijo.

Momentos estelares

Todo se dirige a esa motivación que nos sorprende con sus intereses no creados. Nos regocijamos con momentos estelares.

Sin calados

No practiquemos el vacío con una versión un poco callada y cansada. No tengamos la fiesta en otra manifestación amorosa sin calados.

Corregir la amistad

Nos cercioramos de amistades que nos devuelven lo más profundo de una amistad que hemos de corregir.

Todo cuanto viene

Hablemos de ser, de estar, de poder, de seguir con las cautelas de antaño. No vemos todo cuanto viene.

Bagages sin fines

Vivamos emociones sentidas con unos gustos por los planteamientos que nos llegan con sus bagajes sin fines.

Sintonías singulares

Tenemos que vivir en las noches que nos abren las singularidades con unas sintonías que nos ponen en otros lugares.

Ahora que sabemos

Seamos todo lo sinceros que podamos en los nuevos momentos que nos aguardan. No paremos ahora que sabemos lo que no es.

Gracias medio eternas

Consolidemos los momentos que nos organizan con sus menesteres variados. No seamos en las gracias medio eternas.

La voluntad nos detiene

Vivimos ciertas tribulaciones que nos ponen manos a la obra para que la voluntad sea todo lo que nos detiene. Debemos medir esas fuerzas.

Estancia sincera

Todo te diré ahora que no te digo nada de nada. Nos hemos asomado a otra vida que es estancia sincera.

Cuando sea menester

Nos atamos a una vida que nos promueve para cambios siderales. Llegarán cuando sea menester.

Querernos mucho

En otro momento te diré todo lo que pienso, que es una verdad o dos en función de lo que hemos de realizar, que es querernos mucho.

Para una ilusión

Nos sentimos enamorados de una luna que nos ensalza como si fuera la primera vez para una ilusión.

sábado, 17 de julio de 2010

Muy dichosos

La existencia nos dice que sí, y todo será en la vuelta a casa. Nos sentimos muy dichosos.

No ahorraremos en viajes

Todo me consuela con sus momentos más tranquilos. Nos consolidamos como lo que no dijimos. No nos ahorraremos los viajes.

Aparecen las caricias

Construimos varias vidas en momentos de pura fuga que nos invocan con raras caricias que aparecen, claro que aparecen.

Claves presurosas

Consolidamos la experiencia con una vida que nos señala con brumas que buscan en otras alertas sin dar con las claves presurosas.

Otros instantes de gracia

Medimos los momentos para que no se acaben, pero ésa no es la fórmula. La vida tiene otros instantes de gracia.

No debemos

Temblamos ante las ansias de una felicidad que no viene a borbotones, como antes. Nos disgustamos, pero no debemos.

Si lo demostráramos

Tiemblo en este camino de verdades que podrían ser profundas si nos quisiéramos de verdad, si lo demostráramos.

Noches que haremos eternas

Hemos cobijado los deseos con unas verdades que son en las otras caras de noches que haremos eternas.

Convertir en estructura

Nos confiamos en la nueva coyuntura que hemos de convertir en estructura para que las cosas funcionen de verdad.

Buenos y malos momentos

Dominemos las ansias de una libertad que debe ser asida por la admiración y el respeto por los otros, por quienes nos quieren y nos acompañan en todos los momentos, en los buenos y en los que no lo son.

Conocer las desganas

Eres lo más grande en la noche que trae lunas que nos harán eternos. Las consultas son tomadas en consideración para conocer las desganas.

En serio

Me abrumas con esas respuestas que nos vienen sin preguntas estimadas. Nos tomaremos en serio.

Sin disimulo

Hemos implicado los puros deseos con unas ganas de cansar en las otras noches que nos vienen sin disimulo.

De una noche divina

Me pones en unas situaciones que han de abrumar con las repentinas ganas de ser en las otras caras de una noche divina.

Rematados de besos

Imitamos el mundo con unas sorpresas que nos gustan, que nos infunden todos los respetos. Nos rematamos de besos.

Moneda autóctona

Me he quedado en una soledad que me embarga, que me puede, que es en la otra cara de una moneda autóctona.

Al azar

Hemos avisado de querencias que nos ponen en ese brete que nos arrima ascuas a sardinas conseguidas al azar.

Señal y santo

Me atrevo a consultarte algunas experiencias que me nublan la vista. No te podré referir lo que es señal y santo.

Ocasiones y etapas

Cuajamos realidades que confunden los momentos que deberían convertirse en puras etapas con sus correspondientes ocasiones.

Deseos que nos sorprenden

No podremos asumir que las cosas sean en la pura distancia. Hemos acuñado deseos que nos sorprenden.

Con pasos agigantados

Presiento que la vida es en otros supuestos. No podemos celebrarlo todo. Las consultas llegan con pasos agigantados.

A superar

Insistimos con explicaciones que se estropean en un camino sin recorrido. Tenemos muchos inconvenientes que vamos a superar.

Lo que podría ser y no es

Dispongo que seas. Has previsto un amor que cansa en la larga espera que todo lo confía a lo que podría ser y no es.

Por otros recorridos

Podremos despejar las incógnitas con las premisas de un amor hermoso que nos ha de conducir por otros recorridos.

Ansias de libertad

Te siento parte de mí, de todo cuanto tiene un poco de sentido. No negaremos las ansias de libertad.

Causas y situaciones

Nos lanzamos a ese vacío que nos puede del todo. No podremos ver las causas en otras situaciones.

De ancla

Me divierte pensar que vamos a estar juntos en varias vidas. Me divierte servirte de ancla. Me divierte.

Menos naturales

Hemos vivido en espacios que nos aplican selecciones que son todo menos naturales. No vemos más allá de nuestras narices.

Momentos inalcanzables

Tendremos que ir hacia la nueva fiesta que nos divierte con unos momentos que creímos inalcanzables.

En los momentos más conseguidos

Todo parece en esa noche que nos confiere panoramas de fiestas. Vivimos en los momentos más conseguidos.

Nos queremos entender

Adecuamos los pensamientos para que se complementen. No se trata de ser uno solo. Nos queremos entender.

Con lo que nos confunde

Me sorprendes con lo que haces y con lo que no, con tus sonrisas, con los ademanes más queridos, con lo que nos confunde.

Un instante de amor

Consigo estar, y ser, y tener, y confiar en las afirmaciones que todo podrían decir en un instante que será de amor.

La que ya tenemos

Confiamos en esos momentos que han de engrandecer los instantes más poderosos. No estamos en más ocasión que la que ya tenemos.

De otras existencias

Empeño mis deseos en unas brumas que nos conforman con fuerzas que no verán los salientes de otras existencias.

Los mejores días

Magnificas las emociones que son sonrisas en las laderas de unos días que han de ser los mejores.

Donde desean

Dispongo mi ser ante ti para que sea en la noche de unos tiempos que han de conseguir estar donde desean.

Otras vidas que nos aguardan

Dibujo tu nombre entre sombras que se han de convertir en soles con los que nutrir otras vidas que nos aguardan.

Conformar en positivo

Intentamos que las vidas sean en un tránsito hacia la voluntad que tanto nos puede conformar en positivo.

Infancias queridas

Tendemos los buenos propósitos con unos gustos que nos involucran con recuerdos de infancias queridas.

Donde no las necesitamos

Nos paramos en el momento más inoportuno. No pongamos piezas donde no las necesitamos.

De cualquier modo

Nos contentamos con una fórmula que nos adivina las intenciones, que nos tienen de cualquier modo.

No entretenidas

Tenemos muchas formas de ver la vida que nos resume algunas reacciones que no serán entretenidas.

No con otros sentidos

Convenimos lo bueno con lo que nos parece lo mejor. Nos volvemos con una buena amistad. No demos con otros sentidos.

El buen cariño

Preñemos nuestros anhelos de devociones que figuren donde sea menester. No seamos unos insensatos a la hora de defender el buen cariño.

No atrás

Nos recordamos y nos recuperamos con una amistad que nos siente como lo que somos. No podemos quedarnos atrás. La vida es mucho más de lo que vemos de primeras.

La ilusión misma

Hemos avistado lo mejor y hasta lo peor en un universo que nos promueve hacia la ilusión misma.

Pasados y presentes

Nos figuramos una forma de ser que nos entronca con palabras que son pasados y hasta presentes.

Nuestro curso

Creemos en una apuesta que nos debe imponer un poco de buen humor. Nos debemos entender. No neguemos nuestro curso.

Quiénes somos

Vivimos la sensación que se traduce en vida, y somos en la distancia que nos recuerda quiénes somos.

viernes, 16 de julio de 2010

Señalar un deseo

Vivamos la paciencia de un amor que nos debe señalar con un deseo largo, sinuoso, presto a lo que hemos soñado.

Más nosotros mismos

Simplicamos la vida con lo más sencillo, con lo que nos consulta un amor o dos para ser mucho más nosotros mismos.

Prevenidos

Admiramos lo que reconocemos como propio en una nueva tesitura que nos previene de otras pugnas.

Vivir el amor

La existencia nos sorprende con sus cansadas miradas hacia la misma nada que nos rodea. Hemos adecuado varios discursos. No hablaremos del amor: se trata de vivirlo.

De la misma vida

Reiteramos esos momentos que nos dieron todo el espacio posible. Nos hemos enamorado de la misma vida.

Fortuna que podemos gestar

Asumimos algunos anhelos que nos rodean con la mejor fortuna que podemos gestar. Nos pedimos otra cosa.

Fiesta merecida

Tengamos esa fiesta que nos merecemos por todo lo que hemos bregado hasta ahora. Sigamos por otro lado.

Justas medidas comunicativas

La justicia, cuando menos, ha de ser un fin, también un medio, una búsqueda de virtud. Tengamos la paciencia, la prudencia y las ganas de salir de la mejor manera que podamos. La vida es destreza, es afición, es cordura y fortuna con sus dones más bellos. Detengamos el presente con una actitud de futuro, con las ideas claras respecto de lo que queremos y podemos hacer. Sigamos las estelas de quienes nos ofertan ocasiones con las que caminar juntos, en pos de promisiones que nos permitan comer en sana actitud y con resultados apetitosos y apetecibles. Todo es posible, si ése es el objetivo marcado.

Las sonrisas nos deben aderezar el cuerpo con las cartas donde nos narramos experiencias vividas o pendientes de saborear en un extremo de casas convertidas en hogares y en cabañas sólidas y solicitadas al albur de la memoria, siempre esquiva cuando se trata de ver qué solvencias relacionales nos dieron lo mejor de sí. No es fácil saber de los otros, de los demás, de quienes nos traen sensaciones de arreglos fáciles. Las hermosuras nos llegan en una óptima dirección.

Situemos las voluntades en sus justas medidas, más que nada para que se perpetúen ante las intenciones de los que no ven que las cosas se complican cuando las consideraciones no están en el orden establecido. Digamos que los honores son entre espacios que dan al vacío. Glosar lo que pensamos y decir lo que somos son partes de una misma moneda existencial con la que convencernos de sinceridades y de singularidades.

Disolvamos esos aspectos que no añaden lo deseado. Las condiciones de las vidas nos olvidan en trozos de algodones que nos consuelan con paños de paciencias que nos han de aliviar ante las creencias de unos y de otros. No pongamos tierra en lo que ha de amanecer despejado. Las conciencias se adquieren a base de mucha práctica. Lo divino es consecuencia de la panorámica con la que queremos hacer nuestros particulares planos. Podemos moverlos, pero no salirnos de ellos.

Abrir diálogos es llegar a consensos con los que animarnos cada día, a cada momento. No separemos colores sin darnos las suficientes alternativas. Consideremos las emociones que nos hacen establecer unas memorias sin ataduras. Pensemos en salir adelante con unas visiones espléndidas y liberadoras. No apaguemos fuegos que nos pueden servir más adelante, ni tampoco los avivemos cuando nos puedan alcanzar. Las moderaciones nos otorgan unas hermosas calificaciones que hemos de atesorar como fortunas fantásticas que nos ensalzarán como grupo, como idealistas que somos, como elementos del estado de la cuestión en sus mejores momentos. Establezcamos comunicación. Estemos pendientes. Aseguremos el esfuerzo, y los resultados, para nosotros, o para los demás, vendrán cuando sea menester. No atribuyamos más a un lado de la nave, y seguro que, en ese afán moderado y justiciero, daremos con abundancia para todos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Pura cercanía

La vida es destreza en un instante de pasiones queridas. Somos en la distancia, y también en la pura cercanía que certifica lo que nos complace.

Algodones maravillosos

No debemos sugerir las astucias de un mundo que se sorprende con sus razones más lindas. Nos miramos a la cara, y somos entre algodones maravillosos.

La relación simbiótica entre la comunicación y la vida misma

Optimicemos la experiencia con el anhelo de sacar provecho a los aciertos y con el objetivo de no repetir los errores. La comunicación es existencia misma: la una se une a la otra, y acaban siendo lo que la simbiosis de ambas procura. Creo que la navegación de cada día, de la existencia misma, nos lleva por tantos derroteros como nuestro valor sea capaz de engullir. Sí, es cierto que hay circunstancias que nos superan, que nos ponen en un brete difícil de superar o, cuando menos, de afrontar. No obstante, somos más dueños de nuestros destinos de lo que acertamos a confesar. No siempre nos gusta lo que vemos, sobre todo si lo hemos generado nosotros. No olvidemos que todo es mudable, y, fundamentalmente, que lo puede ser para mejor.

La vida es un eterno aprendizaje donde hemos de coger la cosecha más bella, la que nos endulce y haga más llevadero este caminar no sólo a nosotros, sino a todos. Cuando se participan los ambientes joviales, éstos, inevitablemente, afortunadamente, nos brindan contextos de dichas que se expanden y nos hacen vivir con generosidad y con gracia. Sigamos, siempre que podamos, en esas direcciones que nos añaden, que nos otorgan gracias sinceras y simpáticas.

Amontonemos en cualquier lugar visible los buenos momentos que hemos experimentado, y digámonos el porqué de su desarrollo. Saquemos lustre a las ilusiones que, a menudo inesperadamente, nos tocan con sus mágicas determinaciones vitales. Las sugerencias han de venir desde el lado de unas causas que han de propulsar los momentos más queridos. Seamos del todo.

La existencia humana es el resultado de muchos eventos, de un acontecer con variables y órdenes diversos y dispersos. Tengamos memoria sana para recordar lo bueno, y para que lo malo sea tenido en cuenta para su superación o circunvalación. No sentenciemos con malos pronósticos el acontecer diario, que ha de preñarse de melodías y de tranquilidad. La calma siempre es una gran ayuda. Tomemos el tiempo que nos incluye en estancias protectoras.

Curemos las heridas que se vayan produciendo y continuemos con esfuerzo y sin trampas hacia ese territorio que nos conforta y nos da coraje para lo que tenemos que vivir. Abramos los corazones y nuestros intelectos para suspirar por interioridades que nos otorguen esas gracias más señeras y estimadas. Continuemos en las adquisiciones de conocimientos y de detalles que nos han de ubicar con pacientes deseos de salir de las estrategias y de obtener los mejores resultados en buena lid, si puede ser. Por intentarlo que no quede. En eso consiste el viaje. Seguro que contarlo es un acicate para que los eventos se sucedan en un mejor orden y con más concierto. Pongamos sobre la mesa las claves de una comunicación que es crisol de la vida que queremos o que, al menos, sustentamos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Desde lados diferentes

Nos hemos suscitado más y más dudas en un momento que será sensación y vivencia desde lados diferentes.

No desertarán

Los olvidos nos han de proponer las ansias de libertad necesarias para dar con los toques maestros. Los cariños no desertarán.

Comunicaremos mejor

Figuramos al frente de una ilusión que hemos de potenciar más y más. Nos comunicaremos mejor.

Palabras tiernas

Vivimos otra mirada con consejos que nos otorgarán beneficios de tiempos memorables. Nos consolaremos con palabras tiernas.

Momentos críticos

Nos ponemos en otras fases. Nos recordamos. Hemos dado ese nuevo anhelo que nos incrementa las ansias de querernos. No nos superan esos momentos críticos.

Con objetivos diversos

Eres ese cariño que me soluciona muchos anhelos no escritos. Nos ponemos en marcha con objetivos diversos.

Románticos

Nos hemos separado de esos peligros que también eran oportunidades. Nos saldremos con los deseos a través de unos momentos queridos. Los atardeceres serán románticos.

Rescate de besos

Eres esa razón que me hace ser. Nos conocemos con todas nuestras características. Me ofreces un rescate de besos.

Competir cada día

Me empeño en llegar a ti a cualquier coste, y en eso me equivoco. No vamos a competir cada día.

Besamos también

Nos regalamos informaciones que nos unen con esos amores que se han convertido en lazos indelebles. Nos ponemos a bailar. Besamos también.

Con recuerdos nuevos

Los ánimos nos llevan a dar con unos criterios que nos definen como lo que nos complace con recuerdos nuevos.

Cierta amistad

No te puedo contar que las cosas sean de un modo u otro. Hemos señalado el camino con una cierta amistad.

Deseos espectaculares

Vivimos paños de sugerencias que nos ablandan los corazones con unos deseos un poco espectaculares.

Fuerzas nuestras

Atravesamos lugares inhóspitos con unas fuerzas que no parecen nuestras. Lo son. Ya veremos lo que nos queda.

Curará el amor

Te puedo decir todo y de todo en unos momentos de incertidumbres que nos llenan de pesar. El amor curará.

Tregua

Brindamos ante un Sol que desconocemos, y nos pedimos un tiempo que ya ni existe. Nos daremos una cierta tregua.

Llegaremos

Revolvemos algunos escenarios con unas fortunas que no son tangibles y materiales. Llegaremos de otro modo.

Lugares que no comprendemos

No sabemos por dónde caminan las sorpresas que nos ponen en lugares que no terminamos de comprender.

Realidad distante

Confundimos espacios con unos sonidos que nos procuran una razón con unos momentos de realidad distante.

Senderos y certeza

No me digas ese todo que hoy nos ubica de malas formas en unos senderos que nos regalan poca certeza.

Como somos

Nos apasionamos ocn las vivencias que nos ponen en bretes que nos quieren como somos, o eso parece.

Recuerdos posibles

Hemos agotado unos esfuerzos que hemos de multiplicar con unos pasatiempos de recuerdos posibles.

Consultas tardías

Me involucro en las razones que me piden memorias que ya no tenemos. Las consultas llegan tarde.

Faltarías tú

Toco esa madera que me propone quedarme en un umbral sin destellos y en soledad. Me faltarías tú.

Humos supuestos

Resolvemos amores y deseos con una cantidad de señales que nos hacen vivir entre humos supuestos.

Lid de amor

Siguen algunas alternativas que hemos de aprovechar como oportunidades que son. Nos sentimos en pura lid de amor.

No te podré dejar ir

Nos involucramos en resoluciones de los que consideramos ocnflictos medio inermes. No te podré dejar ir.

Asuntos nobles

Nos sorprende lo que nos ocurre. Hemos averiguado algunas creencias que nos dieron cartas con asuntos nobles.

Cuando estábamos solos

Nos sorprende ver lo que nos ocurre por caminos que nunca transitamos cuando estábamos solos.

Cariños sugerentes

Giramos para ver y no ver los asuntos en los que nos sentimos complacidos. Hemos sido testigos sin cargos de cariños sugerentes.

No con otros tonos

Consentimos y complicamos la vida con un toque medio mágico. Iremos donde sea menester. No daremos con otros tonos.

Versión

Tengo que darte un sí que me lleva donde no será. Hemos hablado de una versión donde los dos seremos protagonistas.

Amores que nos hermosean

Nos postulamos como esos buenos amigos que han de seguir por sendas de amores que nos hermosean.

La amistad que nos resuelve

Brotamos ante una nueva realidad que nos difiere con cambios que nos complacería tener en la pura amistad que nos resuelve.

Del todo

Nos protegemos del amor, que nos hermosea con sus soniquetes más sonrientes. Nos hemos enamorado del todo.

No nos alejaremos

Consentimos un amor que nos conmueve con sus señales de identidad. No iremos tan arriba, pero tampoco nos alejaremos.

Manda mucho lo espiritual

Conmino a mi ser a que vaya hacia esa señal que me indicará cómo puedo salir sin romperme. Lo espiritual manda mucho.

jueves, 15 de julio de 2010

Dudas voraces

Me dispones
un gusto por las verdades
que nos proponen
quedarnos
en el sí
que nos asalta
con su voraces dudas.
No sigamos así.

Sin permanencias

Mediamos
en una realidad
que nos supera
por sorprendente.
No podemos vivir
en un gozo
sin permanencias.

Lo que podría

La fiesta
nos lleva a la paz
que nos asalta
con sus dudas
y sus largos deseos.
No vemos todo
lo que ocurre,
ni lo que podría.

La otra cara

Gestamos
una ilusión
que nos encumbra
hacia momentos
de pura soledad
en la que salimos
hacia la otra cara
de la libertad.

Nos gozaremos

Vigilamos
ese proceso
que nos debería dar
mucha libertad
sin pedir nada
a cambio.
Nos gozaremos.

Evoluciones de antaño

Andamos mansos por la vida, que se duele de tanto deseo que no nos conforta con las evoluciones de antaño.

Salud amorosa

Miramos hacia ese lado en el que vemos todo con una voluntad de entendimiento. Nos curamos en salud amorosa.

Sabemos que lo tenemos

Intuimos que la vida nos regalará mucho amor. Más que eso: ahora, con nosotros en la mejor situación soñada, sabemos que lo tenemos.

Razones que no vislumbramos

Ultimamos los pasos con unas pasividades que nos otorgan beneficios con razones que no vamos a vislumbrar.

Lo que es y lo que no

Generamos los mejores deseos, las mejores sensaciones, todo lo que es, y también lo que no.

Nada de nada

Aumentamos los deseos en unas tardes que nos dominan con sus cansadas miradas. No vemos nada de nada.

Emociones heridas

Platicamos de nuestras cosas, y hallamos emociones que creímos heridas, muertas de par en par.

Buenas estructuras comunicativas

Sostengamos el conocimiento con unos buenos procesos y procedimientos de trabajo y de manifestación de nuestros diversos menesteres. Pongamos todas nuestras energías en el quehacer de superación de cualquier problema de incomunicación que podamos tener. Vivimos la salubridad de un sistema que no siempre se recicla en la medida que nos gustaría. Nos acercamos las situaciones que se convierten en estructuras que nos superan, sin que sepamos los motivos de lo que nos envuelve con sus insistentes carencias. No damos con las claves de lo que nos gustó durante siglos. No sellemos todas las estancias. Hemos de viajar libres con los pensamientos que nos corrigen algunas actitudes que consideramos confiadas. Nos hemos de poner a desarrollar lo mejor de cuanto portamos.

Las existencias nos hacen confluir con unos buenos ánimos que nos destapan las vertientes que nos podrían conducir a océanos de experiencias. No consintamos fracasos por las buenas. Las actividades han de tener sus recuerdos y sus posibilidades en un mundo construido sobre bases más o menos fuertes. No podemos quedarnos atrás sin que demos con las medidas de lo que nos reportó sugerencias con sus mantos envolventes. Todo puede ser hermoso, si hacia ese lado mostramos el máximo esfuerzo. Juremos esa fidelidad cariñosa.

Las dispersas ideas se han de concentrar en los objetivos comunes que han de ser formativos y divertidos. Nos hemos de poner a bregar en la medida que podamos, que seguro que, antes o después, seremos en las capacidades más estupendas y maravillosas. Sigamos hacia ese momento de brillantez que ha de aplicar los remedios más estudiados, pero que han de funcionar en la espontaneidad de una comunicación con la que hemos de salvar lo esencial, lo más querido, lo gentil y bondadoso.

Nos retiramos, en ocasiones, a una franca derrota que nos elimina de un espacio que nos dio claves en los instantes de unas pasiones que nos consintieron unas confianzas de presencias sin premuras. Iremos donde nos podamos comprender, y para eso hemos de ejercer un liderazgo sensacional. Asociemos las mejores coyunturas para convertirlas en estructuras de una situación que no ha de galopar sino ir al ritmo del aprendizaje continuado y conformador de los entretenimientos más maravillosos. La docencia se ejerce cada día.

Acunemos esas felicidades que fueron instantes de poderosos desiertos que hemos de atravesar sin romper nada. Lo curioso ha de quedar como anécdota ante lo más querido. Las simpatías nos deben ayudar desde la consideración más noble. Todo nos ha de complacer desde el amago y la reacción ante las doctrinas de unas actividades que han de sumar como experiencias vitales que son. Corrijamos lo inexacto y aprendamos de todos los errores, y sigamos por un camino jovial que todo y de todo nos dará. Aprovechemos lo mejor y en el mejor sentido. El afán constante y cotidiano nos debe llevar a superar los desiertos comunicativos a los que algunos usos nos quieren acostumbrar. No caigamos en ello. Las estructuras con las que laboramos, con las que hablamos, con las que mantenemos todo tipo de relaciones, han de ser fuertes, clarificadoras de fines y deseos. En ello hemos de estar.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Hacemos la vida

Tendremos que ir donde sea menester. No daremos con las versiones de lo que nos gusta de verdad. La vida es, y la hacemos también nosotros.

La situación que nos complace

Superemos esos instantes de indecisión para arrimarnos a esa nueva situación que tanto nos complace.

La esperanza de la comunicación

La fe lo mueve todo. Sin ella, que nos inserta en el escenario de la ilusión, no tenemos futuro. Incluso cuando las cosas van bien tenemos que fomentarla. No hablo únicamente de un criterio religioso, sino existencial: es la actitud la que nos marca, para lo bueno y para lo malo. Debemos manifestar a menudo esas comunicaciones que nos conectan y que nos hacen compartir un indeleble que nos fortalece y nos hace superar diversas situaciones más o menos complejas. Cada jornada, pensemos, nos recoge esa noche que nos enfrasca en las negaciones para aprender hacia dónde queremos desplazarnos. Nos infundimos un respeto que es admiración para conocernos a cada momento. Nos sentamos a la diestra de una intención con la que sumar ante las causas que no siempre detectamos, pero que inciden en las fortunas con las que crecemos un día sí y otro también, o deberíamos. No nos sustraemos, y sería nuestro deber, a las intenciones, a ésas que tú sabes, que han de arrimar el hombro ante las creencias que nos incluyen en esos planes con los que iremos en pos de una misión que hemos de realizar como posible que es.

Nos determinamos con resoluciones que nos aclaran las voces de aquellos momentos que nos han de determinar con sus causas más estimadas. No seamos entre incredulidades, sino con la adicción de buenos ideales, que deben darnos ese empuje para no quedarnos inmóviles ante todo lo que nos resta por hacer. Sellemos esas promesas que nos deben acaramelar las intenciones y los objetivos diarios. Seamos en lo posible, y esto lo define lo que pensemos, lo que creamos.

Suspiremos por las buenas promesas, por esos menesteres que nos encauzan con sus empresas señalizadas desde la motivación más cierta. Consolidemos las consideraciones con unos humos que han de ablandar los criterios, que deberán ser más flexibles, amoldándose a todo lo que nos queda por realizar. Formulemos las respuestas consensuando las posibilidades que unos y otros nos han de brindar. Olvidemos los malos avisos y construyamos la estructura de una conspiración para la felicidad.

Los elementos que nos envuelven han de tener las suficientes garantías para dar con esa paz que será equilibrio entre sonidos de fugacidad relativa. No sintamos como extrañas las aspiraciones de quienes creen en las verdades de unos criterios simpáticos. Flexibilicemos las circunstancias para otorgarnos esas vicisitudes que han de emparentarnos con las opciones que interpretamos como válidas y valederas. No cuajemos faenas que no nos sirvan.

Contestemos a esa serie de cuestiones que hasta ahora no hemos visto con la voluntad de antaño. Nos hemos propuesto un cambio en la hoja de ruta, que ha de mirar con más positivismo. Pongamos ese signo que es más, que es un plus, que es una danza que nos exculpa y que nos hace que experimentemos los sabores más lindos y jugosos. Sorprendamos a nuestros corazones con curas de aguerrida pretensión, con las que hemos de partir hacia una situación mucho más estimada, más genuina, más conformadora de lo que es el contexto con el que queremos narrar nuestras historias personales y compartidas. Repetimos los suspiros en nuestras conversaciones. De alguna manera quedan. Por eso debemos tener el suficiente valor para asumir con esperanza el riesgo del conocimiento, de la misma comunicación. Ésta señala roles y caminos que, con el necesario concierto, nos pueden procurar muchas alegrías, base también para la esperanza de la que hablamos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Evitar conflictos

Los amores han de catalogarse para saber cuál es la prelación en un momento de conflicto, que, necesariamente, hemos de evitar.

Están las causas

Sigamos esos modelos que nos han de preferir en los momentos de un cierto desconcierto. Las causas siguen, ahí están.

Únicos con tanto amor

Reponemos algunas señales que nos aclaran qué hacer con la vida. Nos sentimos únicos con tanto amor.

Multiplicar el deseo

Todo será en cuanto me digas, en cuanto sea, en cuanto me dispongas una sana caricia. Nos prestamos todo ese deseo que hemos de multiplicar.

Reflexión humilde

Admito tus aires que nos engrandecen, pero también te pido reflexión humilde sobre lo que podremos hacer.

Posible, no aconsejable

Medimos palabras que luego no están. Hemos adecuado los sentimientos, lo cual parece posible, aunque no aconsejable.

Sensaciones que se fugan

Consumimos una razón y media que nos propone seguir hacia otras sensaciones que se fugan.

Más de lo que parece

Estamos juntos, más de lo que parece. Nos sentamos a la diestra de esa soledad que hoy acompañamos nosotros.

Mis credenciales

Te propongo que sigas ahí, con valor, dispuesta a solventar cualquier diferencia. Te presento mis credenciales.

Mover montañas

No podemos querer sin demostraciones claras. No sólo se vive de la fe. Hemos de intentar mover las montañas.

Hasta su conclusión

Nos centramos en lo más esencial para este amor que hemos de compartir de principio hasta su conclusión.

Una o dos verdades

Vivimos significaciones que nos definen como lo que somos, como lo que nos gustaría. Hemos adecuado una o dos verdades.

Hace tiempo

Nos hemos bajado a ese manantial donde el agua se convierte en muestras de cariño. Hace tiempo que quisimos disfrutarlo.

Toca intentarlo

No somos especialistas en nada. Nos hemos comentado por rescates en los albores de relaciones imposibles. No sé si existen. Toca, en todo momento, intentarlo.

Todo es

Todo es. La noche nos oculta con sus intenciones, que no son las nuestras. Nuestro cariño es sincero. También de día.

Presencia distinta

Hacemos frente a la vida con unos conciertos que nos previenen con unos sueños que nos llevan a una presencia distinta.

Las posturas que mantenemos

Justificamos algunas empatías con inmersiones de amores que nos hacen más hermosos por las posturas que mantenemos.

Organizamos las vueltas

Los olvidos nos llevan a ver lo que pudo ser un consejo con calma. Nos sentimos únicos. Organizamos las vueltas.

Una relación ideal

Somos esos amigos que siempre se mantendrán en su sitio. Hemos conseguido una relación ideal.

Más respetos

Hemos complicado las consideraciones. Nos esperan resultados que nos infundirán más respetos.

Reservas en el amor

Nos hemos pedido un amor que luego no es tal. Regresamos con mucha tranquilidad. Nos consultamos con algunas reservas.

Nuevos anhelos

Nos incluimos en un plano que no es de situación. Nos imaginamos entre reservas sin economías inciertas. Nos hemos bañado en nuevos anhelos.

Ocupaciones de cariño

Nos agotamos. Hemos consumido unas partes que nos harán llegar a un todo con volúmenes que seguirán con ocupaciones de cariño.

Actitudes y abrazos

Nos daremos una resolución que podrá disiparse en cuanto lleguen las actitudes que nos inducirán a abrazos.

Servicios ideales

Mantengo esas imágenes de felicidad que en unos días compartimos. Nos damos unos servicios que consideramos ideales.

Vale así

No te puedo contar lo que es versión que ocurre con una dirección mansa. No te podré decir que vale, pero seguro que será así.

Preferencias moderadas

Resolvemos las formas con unos volúmenes que nos integran en preferencias moderadas que no van por donde queremos.

Ver qué ocurre

Estamos preparados para ser entre consecuencias que nos ganan en unos momentos de pura partida. Iremos a ver qué ocurre.

Sin intenciones dobles

Tengamos esas posibilidades con una paz que se marchará para regresar sin intenciones dobles.

Roces y miradas

Resaltamos lo especial con una singularidad que nos viene de roces y miradas que sólo nosotros sabemos darnos.

Destino propio

Hemos asumido algunas decisiones que nos dejan sin las suficientes oportunidades para aclarar los momentos retrasados ante un destino que hemos de tomar como propio.

Fue una contradicción

Hacemos planes para un viaje que nos llevará a un mundo hermoso y con ese amor que dejamos en ninguna parte por miedo a perderlo. Fue una contradicción.

Devociones soñadas

Tendremos que contarnos lo mejor de lo mejor. Hemos supuesto una realidad tras otra. Nos confundimos, pero, al final, damos con las devociones soñadas.

Nos siguen los nombres

Firmamos un deseo que hemos de convertir en realidad en cuando podamos. Los nombres nos siguen.

Admiraciones que nos previenen

Tenemos que entrar en un cúmulo de ofertas que nos aclaran con admiraciones que nos previenen.

Resoluciones cansadas

Abrimos definiciones que nos encantan, pero que nos hacen implicarnos en resoluciones un poco cansadas.

Únicos

Dependemos de amores que nos rescatan. Hemos sido complacientes. Nos sentimos únicos estando juntos.

Con dignidad

Somos afortunados de tenernos. Hemos destacado lo que nos gusta, y ahora toca mantenerlo con dignidad.

Intento nulo

Nos quejamos de lo que nos deja en soledad, pero lo cierto es que el intento ha sido nulo. Cambiemos.

Fuerza para navegar

Eres esa fuerza que me hace navegar por aguas procelosas. Nos entusiasmamos con lo que vamos a hacer.

miércoles, 14 de julio de 2010

Con las miradas

Nos granjeamos unos deseos que nos harán impartir nuevas doctrinas. Nos complacemos con las miradas.

Repartir sentimientos

Me mandas ese mensaje de amor que llega con algunos reparos. No sé si podremos repartir más sentimientos.

Más de lo que diviso

Eres todo, mucho más de lo que logro divisar en esta especie de locura que me envuelve.

Nos esforzamos mucho

Acordamos tomar en consideración unos amores que nos recuerdan todo cuanto fuimos. Nos esforzamos mucho.

La generosidad de la vida

A modo de salutación

La vida es como un tren en marcha con orígenes y destinos inciertos. Dentro de los brillos con sombras que nos rodean están las intermitencias del amor, que nos procura de todo, que nos regala tantos momentos de deseo como de incertidumbre. Los fines del amor no están claros. Probablemente no existan así planteados. Lo que sí debemos convenir es en que los cariños aparecen con objetivos laterales o principales que nos borran algunas etapas de soledad y nos incardinan en las certezas de las esperanzas, que a menudo son vagas.
La lucha pacífica en pos de la felicidad tiene sus estelas fugaces, que, pese a ello, perseguimos con empeño y tozudez. La tarea perenne ha de ser intentar que los instantes de dicha sean mayores, de más calidad y en cantidad más grande. No miremos las esferas de los diversos relojes que nos empañan algunas etapas que nos engatusan con sus movimientos sinceros de riesgo y de equilibrios. Hagamos caso al corazón, aunque se equivoque. Sus aciertos, aunque limitados, justifican muchas penas, algunos pesares que pinchan y cortan desde perfiles indelebles.
Brindamos a continuación las sensaciones de estas poesías, de estas entregas de palabras con sabores agridulces, con unas confianzas simpáticas y queridas que han de conocer los fracasos para entender la verdad de los éxitos. Los papeles están en juego: algunos ya están jugados, pero quedan otros en estado virginal, y otros más, la gran mayoría, que los podemos reiniciar. La vida, en el plano amoroso, como en otros ámbitos, es más generosa de lo que pensamos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

En las mismas ondas comunicativas

Demos con esa frecuencia que nos conforma con una pluralidad de contenidos que, en su diversidad, nos otorga salidas a las dudas. Sumemos. No nos pongamos a perder un tiempo que no tenemos. Hemos de reseñar los aspectos que nos procuran afirmaciones, y no lo contrario. Nos damos unas garantías que nos hacen asumir lo que no es coste en lo unívoco. Nos determinamos con fantasías que nos recuerdan qué podemos hacer. Lo que es o no es no nos detiene: seguimos. Nos hemos tumbado ante las advertencias de quienes nos vienen con sonidos que se fugan. No te diré ese sí que ahora me aboca a sentidos medio nuevos. No termino de entender lo que nos contamos con sabidurías externas. Las conclusiones llegan de manera anticipada.

Nos confesamos amigos de las virtudes que tienen que ver con la solidaridad, que precisamos como garantía medio externa. Nos interiorizamos con panes y peces entre versículos que nos consuelan con sus tonos más fugaces. Iremos a ver lo que no nos ocurre. Las existencias se confunden. Hemos averiguado señales que nos sirven de testigos en la larga esperanza que nos promueve para estar y para ser con sesgos determinantes. No iremos tan a la ligera como en otras ocasiones.

Convenzamos a nuestras mentes de todo lo que es posible hacer. Tengamos la fiesta en esa nueva paz que nos confía lo mejor de nosotros mismos. Nos hemos de presentar sin condiciones, prestos a que las circunstancias nos saquen de esos momentos menos claves. La ida ya comienza a ser regreso. Nos hemos de sentir libres con el sentimiento ciudadano común, que es la base para estructurar lo que nos invierte con procesos destacados. Las convenciones han de ser superadas. Ganemos con miradas de aquiescencia.

Veamos entre frustraciones de creencias medio nuevas. Hemos de adivinar las fechas en las que las uniones son posibles y dar con las instantáneas que pueden resumir los consuelos que son en la medida de algunas confianzas. No pongamos especial hincapié en lo que nos oferta decisiones imposibles. No viajemos sin billete. Puede que tengamos que bajar y volver a subir, y precisaremos, para ello, para entonces, algo que nos justifique.

Sintamos la necesidad, que no la obligación, de comunicar en el convencimiento de que los diálogos nos hacen adivinar dónde se halla esa fe que es capaz de mover montañas. No neguemos las evidencias. La existencia tiene muchas flores que hemos de disfrutar en un paisanaje que nos envuelve con sus tonos más rosados. Sigamos por donde sea menester para que el equilibrio sea el cimiento de esa realidad que queremos construir. Juntos daremos con la necesaria onda. Restauremos ese orden de las cosas que nos gustan, que nos proporcionan la suma aritmética de unos contentos que están en el frontispicio del valor, de la pura ilusión, que es, en definitiva, todo. Si damos con las músicas que nos unen, con las palabras que nos hacen asamblea y comunidad, tendremos el recurso del entendimiento como gran poder de consenso y de convencimiento.

Juan TOMÁS FRUTOS.

A otro proyecto

Estamos preparados para que la verdad nos haga un poco más independientes, a la vez que unidos a otro proyecto.

Mucho impulso

Tendremos que volver con una verdad un poco más estimada. Los años se suceden, y hemos de darles mucho impulso.

De otros instantes

Te contaré los buenos anhelos con unas verdades que nos hacen corregir las empatías de otros instantes.

No llenamos los espacios

Todo es momento y deseo en una nueva vida que nos hace recorrer espacios que no acabamos de llenar.

Lo que nos dicta el corazón

Tomamos los nuevos vientos de una realidad que nos hace obedecer lo que nos dicta el corazón.

Otras cartas

Los amores nos llevan ese tiempo que también nos permite conocernos a nosotros mismos. Nos damos otras cartas.

Menos cuentas

Te escucho cada día. Hemos traspasado una serie de barreras que ahora nos piden menos cuentas.

Todas las caras

Estamos dispuestos a que las vertientes que nos llegan nos den todas las caras del poliedro.

La experiencia de antaño

Nos interesan algunas vivencias que nos podrán dar una respuesta desde la experiencia de antaño.

Lugares nuevos

Tendremos que esperar a ver lo que sucede con rectificaciones que nos ponen en esos lugares nuevos.

Voluntades rebajadas

Acreditas amores domésticos que nos juntan con libres intenciones que rebajan las voluntades.

Se hará lo posible

Regalamos ese honor que es punto de inflexión para el futuro que nos aguarda. Lo posible se hará.

Al principio y al fin

Tendremos que insistir. Nos hemos quejado para conseguir un cierto revulsivo. Nos tomamos en cuenta al principio y al fin.

Otros números

Nos aficionamos con unas versiones que nos clarificarán las verdades continuas. Nos regalamos otros números.

Deseos y realidad

Avisamos de constantes que nos devuelven la vitalidad. No somos operativos. Nos quedamos con muchos deseos que haremos realidad.

Optimizar lo que nos gusta

No podemos tener nada de amor en un cajón que no abrimos. Debemos optimizar lo que nos gusta.

Liberar elementos

Tenemos que volcarnos en lo que nos gusta. Hemos visto esas elecciones como elementos que nos pueden liberar.

Anhelo ilusionante

Nos inventamos un anhelo que vuelve con la ilusión que nos devolverá al paraíso querido.

Un poco fuera de juego

Protagonizamos algunos deseos que no vemos con las utilidades de antes. Nos hemos quedado un poco fuera de juego.

Estrenamos salud

Inyectamos deseos con tipos de existencias que no vemos. Estrenamos un poco de más salud.

Bondades de siempre

Nos damos ese beso que nos libera de muchos silencios. Recogemos las bondades de siempre.

martes, 13 de julio de 2010

Lo que ha sucedido

Me ofusco en la larga espera que me descontrola. No terminamos de entender lo que ha sucedido.

No del todo

Todo nos gusta en este ocaso que nos previene con sus mudanzas más o menos definidas. No te veo del todo.

De la misma vida

Nos entretenemos haciendo todo y nada en un ocaso que nos propone seguir. No vemos más allá de la misma vida.

Son las ideas

Tomaremos conciencia de lo que nos gusta, de lo que somos, de lo que podremos ser. Las ideas son.

En paz iremos

Todo es en otros momentos que nos conducen por razones más que conocidas. Nos iremos en paz.

Como la vida misma

Me amas con todo lo que ello supone. Nos mostramos con una claridad que es meridiana como la vida misma.

Cautela en ninguna parte

Nos modificamos. No somos los mismos. Intentamos perpetuarnos y nos vamos con la cautela a ninguna parte.

Progresos comunicativos

Las emociones de la existencia nos influyen, y deben hacerlo, a nuestro entender, en positivo. Flotan buenos anhelos, los mejores momentos que soñamos y que trasladamos como paladines de la comunicación más maravillosa. Nos sentimos plenos en las trayectorias que nos llevan a ciertas victorias que, siendo compartidas, nos ofrecen unos rastros de causas con sus consecuencias más noblemente distraídas. Comunicar es ser, sentir, vivir, tocar, resurgir con lo pequeño y también con lo grande, con lo hermoso. Todo forma parte de lo que somos.

Nos hemos de volver hacia esos recuerdos que nos permiten que sigamos con las voluntades de una cierta consolidación de aquello que nos resume los momentos más gustosos. Nos debemos comentar, desde el diálogo y el consenso, unas verdades que haremos supremas. Nos permitiremos cada día esas bondades que nos harán incardinarnos en la misma realidad con astucias estupendas.

Los procesos que nos ayudan nos cubren esas expectativas con las que iremos uniendo y llenando los diversos días. Las conclusiones nos deben trazar, al menos, unas hojas de rutas que nos consoliden y que nos aclamen con bondadosas intenciones que no caigan entre señales de vigentes construcciones sinceras. Hagamos que las horas sumen y que no nos agobien en los planos que nos podrían gustar con sus diversos deleites.

Asintamos sin convenciones incomprensibles, y hagamos todo lo posible para que la paz de aquellos que nos precedieron se cumplimente con razones no escritas. Las lindezas de otras etapas han de aparecer con suficiencia, con altura de miras, con razones conseguidas desde el primer peldaño. No persigamos sueños que nos dejen en eriales difíciles de optimizar. Las cosechas han de aparecer tras mucho esfuerzo. Siempre es así.

Las hermosuras nos han de acompañar con progresos que nos permitan avances sosegados, calmados, tomando esas ideas que nos mejoran. No presumamos, y, si lo hacemos, que sea de amigos, de puntos de apoyo, de la suerte que mancomunamos y disfrutamos con los que nos quieren de verdad. No paremos ante los pronósticos de quienes nos ganan con sus empatías y sus ansias de seguir y salir adelante. La existencia tiene varios lenguajes, y hemos de saber utilizarlos en cada momento, en cada postura, con las sorpresas que nos pueden atraer.

Quedan pensamientos flotando en el ambiente, en esa atmósfera que nos participó mejorías interesantes, complacientes y fructíferas. Valoremos los auténticos regalos que son los elementos que nos atribuyen fortalezas conseguidas desde las amistades más densas y profusas. Nos hemos dado buenos ratos, y, con un óptimo aprovechamiento, más que nos daremos. Surgen motivaciones que modifican las ideas y que las mejoran con las traslaciones de instantes puros y poderosos. Nos hemos de convenir en las conformaciones de las buenas realidades. Para ello hemos de procurar esos avances comunicativos existenciales que nos han de ayudar a tomar partido.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Que me puede

Admito sabores que me ponen en una brecha que me puede. No te podré decir lo que pensé.

En otra órbita

Llegamos con sensaciones nuevas que nos hacen vivir en el trasiego más querido. Nos ponemos en otra órbita.

No te veré siempre

Hoy eres tú, y soy yo con todo lo que ello supone. La vida nos resuelve algunas carencias. No te veré siempre.

Mucho nos convenimos

Te confieso unas verdades que me dejan con el corazón en vilo. Te miraré otro día. Nos convenimos mucho.

Lo gracioso

Os reconozco una valía que me hace protestar contra la dejadez de un universo que no siempre pondera lo gracioso.

No bien

Nos hemos aplicado a vivir de la mejor manera. Las controversias no se llevan bien con lo que deseamos hacer.

Era señalizada

Nos complacemos con unas raíces que hemos de considerar profundas. Nos consideramos los mejores de una era señalizada.

Cómo vivir

Proyectamos los deseos hacia esos momentos de pura sensación, que nos recuerdan cómo vivir.

Regalamos más

Hemos insistido con tonos que se quejan de unos elementos que añaden deseos no escritos. Nos regalamos un poco más.

Promesas queridas

Vivimos la fantasía de una verdad que nos hace disfrutar. Nos cumplimentamos con promesas queridas.

Deleitados

Nos ponemos en el turno de una amistad que nos promueve con miradas que nos distraen. Nos hemos deleitado.

Si no somos sinceros

Nos tenemos que ver en otros instantes. Los valores nos dan lo máximo y lo mínimo. No podremos querernos, si no somos sinceros.

Reglas y caras

Tendremos que ir con un alcance menos realista. Hemos admirado lo mejor. La vida nos alivia con reglas de otras caras.

Es la vida

Tendremos que ir con lo más probable. Repasamos algunos deseos medio nuevos. Nos hemos confortado. La vida es.

Caricias cálidas

Tendremos que ir y que estar con una verdad que nos conmnueve. Hemos preferido otras cálidas caricias.

Amores que hermosean

Recibimos los mejores anhelos con cumplimientos que nos mantienen entre avisos de amores que nos hermosean.

Avisos requeridos

Hemos asumido las vidas con unas intenciones más que gustosas. Nos recibimos con avisos requeridos.

Razones y abrazos

Nos cumplimos. Hemos cubierto los deseos con unas verdades similares. Nos gustamos con razones y muchos abrazos.

Mucha distinción

Vivimos en las negaciones que son las nadas con sus comienzos más claros. Nos damos mucha distinción.

Buenos anhelos

Nos ponemos en esa tesitura que nos complace. Nos reunimos en torno a los buenos anhelos.

Mucha proyección

Tenemos que participar con una voluntad extraordinaria. Nos hemos puesto en manos del destino. Nos daremos mucha proyección.

Nos refuerza la vida

Tenemos todo el mundo a nuestros pies. El amor nos ha regalado muchos elementos. La vida nos refuerza.

Un sí tremendo

Me has propuesto seguir hacia ese momento más destacado. Nos queremos con un sí tremendo.

Beso divertido

Dame eso beso que tanto me divierte. Hemos señalado varios caminos. Nos enamoramos cada día.

Voluntad tierna

Todo es en ti. Me gustas y te lo digo con una llamada que me propone seguir hacia esa voluntad más tierna.

Anhelo bien planteado

Dame todo y de todo en una encrucijada que nos propone seguir hacia ese anhelo bien planteado.

Nos distrae la vida

Nos ponemos en ese juego que nos previene con sus dichas y creencias. No podremos asumirlo todo. La vida nos distrae.

Madurez

Tenemos ese punto de madurez que tanto nos gusta. Complacemos a quienes vienen con unos soniquetes precisos.

No en la distancia

Mostramos conocimientos con unos deseos que nos llevan a la producción más querida. No somos en la distancia.

Combinar lo mejor

Confieso que podremos estar. Te quiero sin dar esos rodeos que antes nos hicieron combinar lo mejor.

Paces nuevas

Tendremos que ir con todo lo que significa estar y vivir entre querencias y paces nuevas.

No fracasaremos

Constituimos deseos de amor que surgen de una necesidad que aún no comprendemos. No fracasaremos.

Objetivos no escritos

Vivimos con efectos que nos retrasan. Nos vamos a dinamizar con los objetivos no escritos.

Dones excepcionales

Nos dedicamos a existir con unas formulaciones que nos promueven con sus dones más excepcionales.

Intereses variados

Las prisas nos olvidan en los consejos que fueron breves con sus sumas de intereses variados.

Hasta el final

Nos dedicamos a vivir entre imparticiones de querencias que hemos de compartir hasta el final.

Hacia dónde podremos ir

Los calores nos llevan hasta ese punto que nos insufla deseos en ventas irreales. No sé hacia dónde podremos ir.

Menos nos pedimos

Nos damos un principio que nos parece justo. Hemos asimilado varias temperaturas. Nos pedimos menos.

Cargas definidas

Reinamos en los anhelos que nos complacen y nos gustan con sus cargas más o menos definidas.

Más que eterno

Estaremos juntos hasta el último minuto, y nos diremos que el sí será más que eterno.

lunes, 12 de julio de 2010

Garantías óptimas

Hagamos que el honor nos permita funcionar con unas garantías óptimas. No seamos insensatos en las esperanzas.

No fue solución

Aceleramos el paso para llegar antes donde todo fue una parte de una solución que, por no verla en su conjunto, no lo fue.

Veremos lo que no sucede

Me pones en ese momento que es regocijo con sus dones más excepcionales. Iremos a ver lo que no sucede.

No lo de antaño

Nos hemos ilusionado en la creencia de que el cariño nos salvará, como así será. No hemos visto lo de antaño.

Realidades de profunda factura

Todo en ti es un puro reciclaje de deseos con los que aspirar a realidades de profunda factura.

Con las nuevas verdades

Vivimos un nuevo arranque de estructuras que nos harán más sencillamente profundos. Nos agotamos con las nuevas verdades.

Con empeño comunicativo

Hagamos el esfuerzo cada día por entendernos, por comprender lo que somos y lo que hacemos gracias a la participación dialogada. Los procesos de relación, que se sustentan esencialmente en la comunicación, en los procesos comunicativos de distinto tipo, nos convierten en seres excepcionales y capaces de aprender de lo real y de lo abstracto. Así, pues, vivamos la comunicación al cien por cien. No admitamos trances que no nos devuelvan a los momentos más genuinos. Podemos apostar con más fuerza. Estamos listos, o debemos, y seguimos, o debemos, y podemos en todas las ocasiones que nos van llegando. Cada segundo es fundamental para dar con las felicidades que hemos perseguido desde pequeños, incluso sin saberlo. La conciencia nos debe llevar, cuando menos, a intentarlo. La existencia tiene múltiples disciplinas con las que ganar varias partidas.

Comuniquemos, en primer término, con nosotros mismos, con entereza, con ternura también, y sigamos la estela de quienes nos han precedido. La experiencia ha de ser un grado para añadir. No consumamos el tiempo en la inutilidad de la queja fácil o del hastío que no permite emprender nuevas acciones, nuevas rutas para incardinarnos en la versión más original. Movamos esas fichas que nos pueden ayudar. Las contribuciones han de ser de todos y para todos.

Seamos un poco más sensatos cuando sea menester, y arriesguemos en los instantes que nos pueden aportar un poco de más ilusión respecto de lo que es, y de lo que nos sucede. La valentía es siempre un valor añadido, aunque nos traiga fracasos. No se equivoca el que no hace. Podemos realizar cientos de actividades. La vida es eso: intentarlo una y otra vez. Las lágrimas han de asomar casi necesariamente, pero éstas nos deben ayudar a entender lo que es, lo que nos ocurre. Lo positivo debe presidir nuestras vidas.

Sanamos cada vez que intentamos una mejoría, sobre todo cuando es compartida con quienes nos rodean, con quienes nos entendemos desde la voluntad que ha de ser razón y puro deseo. La preferencia por el equilibrio no debe hacernos olvidar el ansia de procurar llegar tan lejos como sea posible teniendo presente el bienestar ajeno, el de los otros. Todos tenemos derecho a ser dichosos. La confianza ha de ser un arma amiga, un punto de apoyo lícito para corregir los momentos de un cierto hastío. Nos preferimos, debemos. Nos hemos de rodear de la hegemonía por y para dar con las claves de unas amistades profundas.

La profusión de ambientes ceremoniales no ha de restar la validez a lo estupendamente emblemático, que nos prefiere con sus normas no dadas en esfera alguna. Las consultas nos han de valer para saber en qué nos hallamos más fuertes. Exploremos lo que sentimos, lo que tenemos, lo que somos. Las actitudes han de recogerse en y con emociones intensas. No nos ceguemos por lo que otros nos dicen. Hagamos caso a nuestros pálpitos internos, que han de subirnos a una cima que nos permitirá otear lo mejor de lo mejor. Seguro que hallaremos espacios suficientes para que la comunicación y sus cosechas nos lleven a cotas precisas y gratificantes. Vivamos esos procesos comunicativos que explicitan todo, o casi. Somos comunicación. Las garantías y posibilidades que ésta nos ofrece nos colocan en un lugar de puro privilegio. Hagamos todo cuanto esté en nuestras manos para que los procesos comunicativos nos convengan y nos aporten un valor añadido y conveniente. No debe faltar el empeño en éste y en otros sentidos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

Pendientes de otros instantes

Planteamos las razones con unos anhelos que nos hacen encumbrarnos a los momentos que nos mantuvieron pendientes en otros instantes.

Asimilar lo que ocurre

No todo está donde queremos. Nos damos unos protagonismos lentos que nos permiten asimilar lo que ocurre.

Cariños fugados

Hemos adivinado las carencias que nos trataban de reforzar con presencias participadas de cariños fugados.

Respuestas glosadas

Repercuten los deseos en unas responsabilidades que nos glosan y formulan respuestas con preguntas incorporadas.

Nos disfrutamos

Nos reunimos en los momentos más brillantes. Pasan las noches con instantes de persecuciones rutilantes. Nos disfrutamos.

Estadio amigable

Correspondemos ocn momentos que nos hacen participar con fuerzas que nos devuelven a ese estadio amigable.

No dos iguales

Aplicamos las recomendaciones que nos dijeron cómo superar los envites de amores fracasados. Nos hallamos en mitad de otro momento que nos rompe una y otra vez. No hay dos cariños iguales.

Demasiado estrictos

Todo es clave en este nuevo reconocimiento que nos propone superar los instantes que convertimos en demasiado estrictos.

Cuando llega el momento

Nos ponemos esos obstáculos que no sirven para nada. Los amores triunfan cuando llega su momento.

Etapa de plenitud

Superamos los límites que nos pusimos en otros momentos. Ha llegado esa etapa que nos dio plenitud.

Complicidades sinceras

Nos pertenecemos. No nos hemos visto antes. Nos hemos reforzado con unas complicidades sinceras. Nos estimamos.

Energías para cada día

Nos interesamos por unos caminos que nos dan impulsos y energías para comenzar cada día. Ascendemos.

Extraordinarios con una mirada

Apoyamos las soluciones que nos dan porcentajes que nos cogen en destinos no previstos. Nos damos una mirada que nos vuelve extraordinarios.

Más tiempo

Creamos una devoción que nos da realidades favorables. No podemos quedarnos en ninguna parte. Te pido más, o, cuando menos, tiempo.

No materiales

Nos advertimos de unas causas que nos dicen que sí cuando las ganancias no han de ser materiales.

Honores mejores

Todo marcha bien porque tenemos la predisposición de que así suceda. Nos vamos con los mejores honores.

Otras direcciones

Resolvemos los instantes que fueron círculos con razones de horas y de noches nuevas. Nos damos otras direcciones.

Vivir en común

Despejamos las incógnitas que nos plantean ligeros momentos de paz, que es la antesala de lo que deseamos vivir en común.

Historias de felicidad

Rastreamos esos caminos en los que nos vimos con las verdades sin razones claras. Los amores son así. Nos damos historias que nos hacen felices.

En un todo especial

No hemos dado con esos albores en los que fuimos buenos con las bellezas interiores que los amigos nos brindaron. Nos convertimos en un todo especial.

Muestras de cariño

No hemos ido porque sí, sino porque nos queríamos ver en un momento definido por muestras de cariño.

Regalos

Bendices mis momentos con tu presencia, con ese respeto y ese amor que sólo tú sabes regalar.

Hemos resuelto

Nos sentimos contentos. Nos mostramos con apoyos y con creencias divinas. Hemos resuelto bien.

Disfrutar de los momentos

Ya te diré otro día, porque en éste toca disfrutar de los buenos momentos por los que hemos laborado.

Cuando deben

Nos sabemos en este tiempo y en este lugar que nos previene con refuerzos que nos llegan cuando deben.

Regresaremos

Tendremos que ir al final de esta historia que ya no entendemos. Nos derriba la vida. Ya regresaremos.

Puros sentimientos

Las claridades nos llevan a las felicidades que nos devuelven regalos magníficos. Somos puros sentimientos.

No terminamos

Juramos unos momentos de amor que, finalmente, se producen. Nos daremos otros protagonismos. No terminamos.

Perspectivas mudadas

Tendremos que recorrer unos instantes que nos harán fugarnos de mitades y de perspectivas mudadas.

En todas ellas

Nos gusta ser. Hemos dado con pocas situaciones que nos definan, pero en todas ellas estamos los dos.

Damos corazones

Nos planteamos unos retornos a los planteamientos que nos regalaron buenos momentos. Nos damos los corazones.

De besos

Alimentamos algunos anhelos que nos plantean un regreso nada anónimo. Nos comunicamos con registros de besos.

De las penumbras

Nos enamoramos cada día de unas emociones que nos proponen consecuciones que nos saquen de las penumbras.

domingo, 11 de julio de 2010

Lo mejor de nosotros

Nos alistamos a un campo de deseos que nos han de ayudar a presentar lo mejor de nosotros mismos.

Nuevas figuraciones

No ejercemos en este nuevo planteamiento de amores entre sueños. Nos debemos proponer nuevas figuraciones.

Recuperar el tesoro

Nos tendremos que divertir con las bromas que compartimos desde que fuimos parte de un tesoro que tuvimos que guardar. Es el momento de recuperarlo.

Desde la quietud misma

No mires esas rocas que han generado ansias de unas libertades que no son. Nos hemos implicado en realidades combativas desde la quietud misma.

Destinos defendidos

Aprendes de la vida con un poco de juegos que te vuelven un poco insumisa ante los destinos que tú misma has defendido.

Un síntoma

Te asomas, duende, con tus ojos que chispean rastros que no dejarás. Nos pensamos, y eso debería ser un síntoma.

Pueden los miedos

Trasteas en mi corazón con un poco de amor. No te puedo dejar ir. Lo haré, no obstante. Los miedos me pueden.

No próxima

Las heridas del pasado nos ocultan los deseos que hemos querido guardar para mejor ocasión. No parece que esté próxima.

Vientos de juventud

Me recuerdan tus toques a las suaves caricias de aquellos vientos que bebimos en juventud.

Estructuras

Dame el sí con otro no, y no permitas que los viajes nos lleven con simulaciones que no estructuran lo que nos gustaría hacer.

Viajes aleccionadores

Aplicamos medidas que se convierten en remedios con los que iniciar unos viajes muy aleccionadores.

Fortalezas y debilidades

Tendremos que ponernos en ese lado que nos previene con sus comunicaciones de todo género. Los lugares nos llevan con fortalezas y debilidades.

Razones variadas

Los modales con los que comenzamos nos advierten de incidencias que nos aplican consecuencias con razones variadas.

Alimentar lo que nos gusta

Mendigo una palabra que me diga que la ceguera es algo pasajero. Poco a poco iremos alimentando lo que nos gusta.

De otro sistema

Nos hemos imaginado una realidad que nos ha de proponer cambios para mejor. Nos sentimos parte de otro sistema.

Seguir las miradas

Dirigimos la amistad con una conciencia de conocer y de dar con las alturas que fueron miradas sin tropiezos, y que deben seguir siéndolo.

Nuestro momento

Nos tendremos que ver en ese punto que fue de cita cuando nos estábamos conociendo. Ya llega de nuevo nuestro momento. Ahora lo aprovecharemos.

Arreglos

Nos debemos dar unas oportunidades gratas que nos impliquen en los arreglos que tanto precisamos.

sábado, 10 de julio de 2010

Averigüemos las valentías comunicativas

Procuremos ese afán que, con el suficiente esfuerzo, nos coloca en una buena posición de salida cada día. Comuniquemos sin rodeos, con las máximas expresiones. Hemos de superar los obstáculos, los andamios que vamos colocando de una manera más o menos consciente. Andamos en pos de amistades que hemos de salvaguardar y de fomentar todos los días del año. Estamos juntos, y más que estaremos. No dejemos que las guardias nos asalten con sus dudas sin métodos ni esas razones para ser y tener en la misma nada que nos aguarda con sus medias querencias. Procuremos que sean enteras. Nos hemos de poner en ese lado que nos insiste con sus devociones de todo género. Nos gustamos, y eso lo debemos demostrar cada jornada, a cada paso, con las consistencias de unas tremendas voluntades que nos dirigirán la mirada hacia las mejores sensaciones. No nos distraigamos. Las pretensiones de han de transformar en pura materia prima de una felicidad efervescente.

Las atenciones que sólo tocan los aspectos materiales nos llenan de desdén y de algo de indiferencia entretenida. No consintamos métodos de registros posibles con sus causas menos ganadas. Nos hemos de proponer unas motivaciones que nos deben hacer sumar ante las intenciones más o menos objetivadas de quienes vienen con sus sonidos cansadamente interpretables. No obstruyamos el destino al que tenemos derecho, digan lo que digan.

Reaccionamos ante las tendencias que nos obligan a tomar partido por las razones de unos y otros en las formas que más nos gustan. Complacemos a los que vienen con el son de una versión que nos sabe a decisión bien tomada porque consideramos el todo y mucho más. Hemos sido en las grandezas de espíritus que nos distraen. No podemos negarnos las pasiones que nos alimentan en el sentido de darnos fuerzas para no cegarnos y quedarnos inmóviles. Las fórmulas del cariño, las amparadas en él, nos ofrecen un sentido mucho más noble de lo que vivimos.

Singularicemos las posibilidades con las formulaciones que nos hacen adivinar las valentías de aquellos esfuerzos que incluyen lo mejor con las causas que no son enigmáticas porque sí. Hemos obviado algunas intenciones, que hemos de consolidar sin colmatar las pretensiones que llevamos en mitad de unos espíritus que precisan ocasiones para tener la autonomía que les hace genuinos. Vigilemos en libertad, y con ella seamos un poco más inteligentes. No se trata de saber, sino de administrar lo que vamos aprendiendo.

La vida está repleta de sorpresas que nos invitan a tener un alimento un poco más grato. No permitamos que las cosas se queden en un estadio de difícil reflejo. Poco a poco iremos llegando donde las aspiraciones adquieren un sentido menos sentimental y más cuerdo y humano. No aspiremos a más de lo que nos pertenece, en la idea de que no siempre debemos mirar más arriba. A menudo quedan cuestiones no protagonizadas en un pasado que transcurrió en vacío, sin ser optimizado. No pongamos trabas al destino. Superemos las indiferencias comunicativas. La existencia es acción, es compromiso, es ponernos en el tajo, en la convicción de que sólo así podemos llegar a alguna parte. Hemos de averiguar las diversas valentías que nos permiten relacionarnos y ser más juntos, todos juntos.

Juan TOMÁS FRUTOS.

No pasan los segundos

Intentamos estar un poco mejor. No hemos visto el camino del olvido, pero cada vez está más cerca. No pasan esos segundos.

Otra ocasión en la vida

No vivas con complejos sistemas de entendimiento. Has sido una estrella a la fuga, y ahora toca entendernos. La vida nos ofrece otra ocasión.