Trabajemos
con toda la pasión del mundo.
Podemos vivir con más verdad.
Debemos.
La paz está ahí
por si queremos saborearla.
Hagamos el máximo esfuerzo.
Reutilicemos
los hechos con divertimentos,
con toques maestros
que nos han de llevar
a la emoción más sincera.
Regulemos.
No apaguemos las experiencias.
La vida es una gran promesa
que iremos cumpliendo
desde la ilusión comprometida
con nosotros mismos.
Aseguremos un poco.
Instruyamos al corazón
con la virtud más generosa.
Podremos ser felices
desde el equilibrio y el buen hacer.
Queramos
sin dar rodeo alguno.
Amemos mucho,
y seguro que daremos
con lo que precisamos.
Hagamos que el cariño triunfe.
Todo será.
Y nosotros también.
Juan Tomás Frutos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario