Iré a ver
lo que ocurre
entre voluntades
de preferencias dichosas,
y, mientras soy,
te diré que podré estar
donde sea menester
para volver a captar
las bellezas
de unas naturalezas
nada fingidas.
Te diré que sí
con precaución,
con sensaciones gratas
que todo propondrán.
Añoro tus caricias.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario