Sé que no seré
esa misma persona
alegre en busca de amor
entre espectáculos
en picado.
Sé que lo sucedido
impone su ley,
unas normas de duro
cumplimiento en la oscuridad
que acompaña
el compás que no admite
esperas controladas
Sé que nada será igual,
pese a las reflexiones
y buenos propósitos.
Nos adecuaremos
a algunas peticiones
de ese universo vacío
que queda por delante.
Admitiré esos recuerdos
que demostrarán todo
lo que sé,
que es que nada,
absolutamente nada,
será igual tras tu marcha.
El dolor me puede:
jamás pensé que podría
sufrir tanto o más
en el intento de ser feliz.
Sí, lo sencillo
se ha convertido en complicado:
entiendo que así es.
Sé, hoy sé más de la cuenta,
y quisiera no saber,
no hoy, ni mañana,
por favor, no saber.
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