Rectificamos la vida
con más deseos de paz.
Nos hallamos
al frente de una revolución
que nos implica en lo básico.
Nos tenemos
en encrucijadas que lamen
las heridas del pasado
y sanan de cara al futuro.
Nos premiamos
con versiones mejoradas
de un amor que colma
de ilusiones y anhelos cumplidos.
Nos transformamos
en la realidad de las cosas,
que nos multiplican.
Estamos en equilibrio.
Sanamos.
Perdemos de vista
lo que puede hacer daño.
Todo cuanto tenemos
repara y contenta.
Nos asimilamos en positivo.
Nos declaramos cuerdos
con esa locura que columpia
y da voluntad de cambio.
Estamos donde necesitamos.
Juan Tomás Frutos.
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