Somos magníficos
en el deseo compartido,
en el que nos rodea
con sus brazos claros
y prestos a estar bien.
Nos establecemos
en ese rincón que nos define
con sus envíos
hacia el corazón,
que protegemos
con actos de amor.
Todo cuanto hemos aprendido
lo vamos a compartir
en ese pronto que haremos eterno.
Cuajamos el momento estelar
con unas vivencias
que nos unen para siempre.
Estaremos en el mejor altar.
Juan T.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario