lunes, 1 de septiembre de 2008

No te sorprendas

Te cuento lo que pienso, que es que estoy enamorado. Esta expresión se habrá repetido durante centurias en este planeta, pero te aseguro que este sentimiento es imposible de emular.



Aprendo desde la distancia que es olvido. Te sugiero una apetencia maravillosa con resultados poco definibles. Te comprendo, y te digo sin duda alguna que todo volverá al punto del que no debimos apartarnos.



Te has presentado en mi vida sin equipaje, pero la has llenado como si vinieras con toneladas de aceite de pasión. Las compartiremos.



No te sorprendas por lo que sientes. Otros han pasado por ahí y les ha ido bien. No hay nada que indique que lo nuestro no puede ser. Lo que sucede es que los sentimientos a menudo nos confunden, como la existencia misma.

No hay comentarios: