martes, 3 de junio de 2014

Cuestión de tiempo

Aplaudamos
esos deseos que nos liberan
en cuanto salta la gran duda
que surge sin método,
arrastrando los sinsabores,
que aplaca con intenciones calladas.

Seamos en las promesas
que nos permiten vencer
ganando cada partida, 
jugando a lo que nos merece la pena
desde la óptica del amor.

Nos hemos de brindar
espacios y tiempos
con los que animarnos
ante las calificaciones
que nos llenan de sosiegos
incomprensibles, silentes.

Invitemos
a las condiciones y circunstancias
que nos previenen y plantean
unos recuerdos que fueron
y que volverán
en cuanto pueda ser factible.

Tenemos mucho.

Acudamos a la ilusión
más cierta, la que nos suelta
ante mil impaciencias, de los generosos fines.

Lo que espera es maravilloso.
Es cuestión de tiempo.

Juan T.

No hay comentarios: