Vivimos la preciosidad
de un destino
que nos une
más de lo que sueñan
las palabras.
Experimentamos con alegría
ese instante que nos porta
al infinito,
que exprimimos más.
Nos confortamos
sin sacrificios, de modo natural,
dejando que la experiencia
nos enseñe
lo que no nos regalan los libros.
Nos mojamos
mientras superamos los sueños
que se alternan y se hacen realidad.
Nos aceptamos como somos:
eres la llave.
Estamos juntos.
Vivamos, pues, el momento.
Juan T.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario