Comunicar es vivir

Nos mostraremos en las noches de eternas caricias con creencias en el umbral que nos llevará al otro lado de una devoción enorme. Haremos de la existencia una ilusión realizable.

Debemos dar en adelante los pasos suficientes para progresar como sociedad, en lo colectivo. Hablemos de buenos intereses. Tengamos la fiesta como base para la alegría que hemos de expandir. Funciona.

Hagamos que las sensaciones nos conduzcan por vericuetos de espléndidas caricias con las que animarnos hacia el quehacer mayor.

Tengamos la fiesta en ese plano del momento álgido. Pongamos el pie en el sitio donde podemos aficionarnos a la bondad, que siempre nos repara y nos devuelve lo mejor de lo mejor.

No concluyamos con prisas. Vayamos poco a poco, al ritmo que precisemos, haciendo caso de los aspectos internos con el fin de dar con la justicia y la quietud.

Comunicar es vivir. No conviene que renunciemos a nada.

Juan TOMÁS FRUTOS.