Mucho por hacer

Nos hemos de abonar a los claros deseos. Nos fugamos. Volvemos. Somos en esa trayectoria que es noria emotiva.

Nos debemos proponer un seguimiento no periódico. Hagamos caso a los corazones no heridos. Podemos vivir en paz y ser muy felices.

Cuajemos los momentos de bondad con unas creaciones activas. No sigamos en la noche de los tiempos en sombra. Podemos abarcar mucho. Seamos en la sencillez más tenue.

El aprendizaje nos puede llevar donde queramos. Seamos libres de principio a fin. Nos hemos de preferir con emplazamientos de amor.

Las esencias han de tener purezas y empatías. Nos hemos de prodigar en la solidaridad con efectos de rebote. Nos queda mucho por hacer, y, sobre todo, bueno, muy bueno.

Juan TOMÁS FRUTOS.