Arrecian los conceptos que nos reclaman instantes poderosos, mejorados, únicos y hasta excepcionales para avanzar por caminos que nos permitan recorrer los espacios más hermosos y deseados. Nos obedecen, los mejores destinos, con tradiciones que nos invitan e invitarán a querer.
Nos hemos de plantear los elementos más diáfanos. Nos debemos a los universos que nos proponen para seguir con las voluntades de existir plenamente en las afirmaciones permanentes.
Nos daremos cada jornada los consejos oportunos para armarnos de valores extraordinarios. Lo que fue volverá a serlo. No rompamos las estructuras que nos han de dar lo adecuado.
Debemos apreciarnos con lo más querido. Nos hemos de preferir. La historia real nos conmueve. Debe. Hablemos de considerarnos desde lo más intenso.
Podemos ser felices. Las definiciones han de ser muestras para acercarnos a las más activas pretensiones. Nos incrustaremos en las verdades más bellas.
Juan TOMÁS FRUTOS.
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