Nos necesitamos mucho

Hemos de procurar asistirnos con fuerza y voluntad de cambio, de transformación para mejor. No paremos en esos lados del camino que no aportan nada. Podemos mucho, pero hemos de ir sin prisa.

Calculemos las opciones que tenemos y por qué, y sepamos por dónde caminar para dar con las soluciones que nos hacen creer en cuanto somos en este nuevo plan que nos rodea de sensaciones nuevas. No dejemos que el destino nos derrumbe.

Podemos asumir muchos trances buenos, con una clarividencia que nos proponga continuar hasta el principio de una era que nos debe entusiasmar.

Contrastemos los pareceres sobre lo esencial con unas íntimas reflexiones respecto de las probabilidades de una dicha por la que hemos de bregar.

La sinceridad en los planteamientos nos debe arreglar unos fines que han de determinar cuánto tiene algo de sentido en este itinerario de preferencias comprometidas con amistades genuinas.

Simpaticemos con las buenas obras. Más que eso: hagamos caso a lo que puede ser una virtud con sabios consejos que siempre hemos de poner en práctica, buscando llegar, antes o después, al paradero que precisamos. Nos necesitamos mucho.

Juan TOMÁS FRUTOS.