Olvidamos quiénes fuimos en un momento de certezas. Olvidamos ser nosotros mismos. Generemos otro destino de universalidad.
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Nos hemos generado sensaciones de amor.
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La vida nos comprende. Hemos indicado más.
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Las sorpresas siguen. Hemos adivinado fluctuaciones.
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Las causas son lo que son. Volveremos.
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Hemos separado lo importante de lo que no lo es.
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Las consecuencias se enumeran. Ya veremos menos.
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Nos hemos tendido al suelo para ver mejor el cielo.
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Las adivinanzas nos conducen por vericuetos señalizados y sin extrañezas.
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Te tengo para lo que sea menester. Lamento lo que nos falta.
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Las vidas tienen muchos trayectos sencillos.
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Envejecemos y casi olvidamos. No debe ser así.
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Señalemos todo el motivo. Las virtudes siguen.
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Hablemos de ser, de navegar.
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No hemos suspendido nada de lo que tenía cierto valor.
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Nos tendremos que ver otro día. Lo espero, lo deseo.
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Las diversiones nos conducen por apariencias serenas.
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Tendremos que contar y recontar lo que nos parece espacio sideral.
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Hemos adivinado algunas posturas. Las mantendremos en otra era.
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Las prestaciones nos regularizan las vidas.
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Te he contado todo lo que puedo, y que puedo, claro.
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Hablemos de apariencias superiores.
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Te cuento, te sueño, te soy.
Juan TOMÁS FRUTOS.
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