jueves, 22 de agosto de 2013

El sentido cotidiano

Hemos de sugerirnos estancias con las que avanzar en noches que nos despierten de las soledades poco didácticas. Hagamos con el corazón lo más sagrado.

Elijamos bien, todo cuanto podamos, con batallas e inercias de superaciones que nos han de alertar en positivo. Todo llega en su momento.

Sepamos los buenos cuentos, con los que hemos de maniobrar con vigías entendibles desde el cielo y en las proximidades.

No nos aburramos en exceso. Vayamos al encuentro que ha de ser cita con presentimientos de lo óptimo. Hemos de contar excelentes historias.

Las simpatías nos han de conducir por veredas de mucho amor. Vayamos donde nos reconocemos con certezas. No dejemos que expiren los tiempos de juventud. Busquemos el sentido cotidiano.

Juan TOMÁS FRUTOS.

No hay comentarios: