Unidad de relación

Los anhelos nos hacen libres en las noches de algodones blancos. Nos hemos aliviado en las creencias de las virtudes calladas, ésas que vienen y van sin que sepamos lo que desean.

Nos mostramos en los procesos comunicativos que nos distinguen con cercanías y diferencias mientras nos postulamos para estar en esos trances que nos hacen diferenciar cuanto es.

Nos movemos hacia esas atalayas que nos convierten en libres. Simpatizamos con las glorias que nos aclaran qué hacer. Nos hacemos caso con apuntes que nos regalan tiempos y creencias nuevas.

Nos vemos, nos miramos, nos hacemos caso con reposiciones lindas, y estamos en esos instantes que nos pretenden con sus maestrías de índoles variadas. Nos tendremos que ver en más de una ocasión.

Sepamos lo que nos avanza sortilegios con los que nos amaremos en las travesías más estimulantes. Nos debemos dar lo mejor para regalarlo a continuación a cada cual. Nos llamamos con frecuencias que captamos en las veredas en las que somos dos en una unidad de relación.

Juan TOMÁS FRUTOS.