Nos fundimos en este nuevo día.
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Nos convencemos otra vez. Somos para siempre.
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Nos descansamos.
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Estamos donde nos esperan. Nos daremos esa mano amiga.
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Nos hemos comunicado con mucho amor.
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Nos recorremos.
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Nos destacamos en la marcha.
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Nos demandamos tiempo.
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Hemos preferido en la noche de los buenos tiempos. Analizamos cuanto hacemos.
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Nos ponemos en funcionamiento para ser. Nos declaramos expertos en el amor, pero eso nunca lo somos.
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Nos reconciliamos con nosotros mismos.
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Nos miramos al espejo del amor.
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Las raíces nos distraen mucho, más, cada día.
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Nos hemos dado análisis de puro amor.
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Nos subrayamos con planeamientos claros.
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Nos conocemos en la voz.
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Nos glosamos con esas voluntades que están donde deben.
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Nos comentamos lo que sentimos.
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Nos quedamos en la claridad del amor.
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Nos dedicamos a nuevos procedimientos.
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Nos hemos alabado en lo sencillo: es lo que nos arropa.
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Nos curamos con mimos.
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Los asombros nos dejan con sencillez. Nos dedicamos a volar hacia el elemento más querido.
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Nos organizamos en la novedad.
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Conseguimos vivir. Nos interpretamos muy bien.
J.T.
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1 comentario:
Vitales, conmovedoras y cargada hasta las trancas de ternura.
Toda una delicia...siempre es un placer pasear por tu blog y, de alguna manera también por tu corazón.
Feliz jueves...sonríe :)
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