Sin necesidades

Respondemos al amor.

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Salimos a tomar el Sol.

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Nos hemos completado.

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Nos titulamos con recortes que se extienden.

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Nos consideramos claves.

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Nos volvemos con sensaciones diarias.

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Nos jugamos el todo.

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Nos hemos dado lo oportuno.

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Nos recordamos lo que fue. Hemos sido con pretensiones.

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Nos damos pies y corazones.

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Nos alentamos con reclamos de amor.

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Hemos señalado lo fácil: ahora iremos, juntos, por lo difícil.

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Nos hemos glosado el deseo que se verá acompañado por el amor.

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Nos anunciamos con besos.

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Nos presentamos con las manos abiertas. Nos hemos pedido avanzar.

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Cantamos ante el nuevo día.

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Nos mostramos con vacilaciones respecto del amor.

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Nos clausuramos al amor, y por ello entramos en contradicción.

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El día, por fin, nos despierta.

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Agasajamos a los corazones, que nos regalan equilibrio.

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Tengamos la mirada serena.

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Hagamos que el deseo funcione.

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Nos damos palabras que son recuerdos.

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Nos agradecemos lo que debemos hacer.

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Nos hemos enamorado de la visión intensa.

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Nos hemos definido con pasiones que nos retienen.

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Nos destacamos cuanto fue.

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Hemos marcado la vuelta.

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No hay barreras salvo que las veamos.

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Nos hemos hablado de algunos límites.

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Nos tendremos que poner en ese lado que nos aumenta las creencias.

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Nos notamos en las noches que fueron lo más visible.

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No hemos abierto la señal del corazón.

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Nos disfrutamos.

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Nos invitamos a la vuelta que nos hace vivir lo posible. Nos hemos tomado en brazos, y vamos más descansados.

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Nos protagonizamos con versiones que nos ponen en el gusto más defendible.

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Nos debemos tiempo. Nos hablamos. Hemos abierto los libros.

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Te comento mis objetivos, que son los tuyos, que he hecho míos.

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Nos conectamos como adolescentes. No hemos cambiado tanto.

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Vamos sin necesidades.

J.T.