Mal alimentados

Nos hemos aprovechado de victorias y de derrotas que no tienen ningún sentido, y ahora no sabemos qué podemos hacer. Llegamos a una meta que nos altera en demasía.

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No me esperas: ya nada es como antes. Estamos en alerta.

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Pasan las horas y seguimos con una tormenta que nos deja sin ideas. Los problemas nos agobian.

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Provocamos resultados con los que no estamos de acuerdo, pero seguimos. Sí, continuamos con complicaciones que nos alimentan mal.