La vocación heredada me lleva hasta tu corazón protector y genuino. Soy pleno en tus pareceres, sin anhelos profundos, con la sencillez que te caracteriza. No hay bloqueo posible.
....
Te considero mi dirección, mi promesa cumplida, mi espacio vital y protegido. No hay manera de olvidarte, ni deseo tampoco.
....
Te tengo en cuenta cada día, con planteamientos sinceros y compartidos desde la verdad y la tolerancia. Mi espíritu te pertenece y se une al tuyo sin ninguna finalidad.
....
Somos compatibles con bromas convertidas y compartidas con todo tipo de facilidades. El tiempo es nuestro.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario