Hemos planteado batalla, y apenas nos ha quedado nada. Debemos cambiar de actitud. Te quiero con todas mis fuerzas, y preciso tu ayuda para superar esos castigos o desvíos que nos oferta inapelablemente la vida.
……
Te sugiero ser, y soy con una plenitud de energías que me devuelven al punto crucial. Nos volvemos más amigos con decisiones que nos aportarán ganas y puros deseos.
……
Te regalo mi cuerpo, y mi alma va detrás. Soy todo tuyo, y te demando un poco de piedad. No me vuelvas un instrumento inútil o inservible: creo que nos podemos favorecer mucho con actuaciones en ambos sentidos.
……
Te pido algo, te solicito más, te imploro calma, y soy virtuoso en ti. No calles, y dime lo que piensas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario