Me manifiesto a favor tuyo. No tengo dudas. Has sido más de lo que pude imaginar, y ahora marco un trayecto que me llevará por lugares altivos. Te dejaré la Luna en una esquina de marco redondo. Iré a donde tú quieras.
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Me colocarás en un sitio extraño que me dictará las sombras sin dudas. Hablaré con una especie de sonido desde una originalidad que me invitará a ser más yo y a que descubras mis intenciones.
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Te atiendo y me pongo con la llave maestra en las manos y con las intenciones abiertas de par en par.
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Te he dicho muchas veces que te quiero; y me doy ese regusto.
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