Agradecimiento y felicitación

Tengo una amiga, una de mis "muy mejores amigas", una gran persona ante todo, que no hace más que decirme que salga un poco en busca de aire fresco, que trate de respirar con un mayor optimismo y que me aparte de las malas influencias, que ella, con una enorme perspectiva, observa en mi entorno. Tiene razón: lo que sucede es que no siempre es fácil tomar el camino adecuado, aunque lo sepamos, aunque lo veamos. La vida ostenta estas contradicciones. Llamamos a menudo a la puerta equivocada y nos dejamos untar por las malas artes de quienes no nos quieren bien. No sé si es mi caso, pero por ahí andan los tiros. La paciencia no es siempre una virtud de aquellos que andamos con el pedal del acelerador a máxima potencia. Hoy, con una dosis importante de mejoría, le digo que lo voy a intentar, que lo intentaré por ella, por gentes como ella, que me aman de verdad, sin tapujos, sin anhelar nada a cambio. Quiero, ante todo, dejar constancia de este pensamiento; y, por otro lado, a otra amiga, que igualmente me regala estos deseos, yo hoy le traslado mis felicitaciones. Ella sabe el motivo cierto.