Un plan de viaje

Presumo de ti, y conoces bien cómo lo hago. Nunca he negado mis apreciaciones, que se conmueven solas con lo que pienso de tu persona. Me entrego a tus brazos, que me rodean y me otorgan una felicidad y una seguridad infinitas. Me siento muy orgulloso, y lo vocifero todo lo que puedo. Gano un jubileo que me impone la gran fortuna y la mejor moral. No atiendo tus razones, que me liberan y que me disponen con unas sensaciones muy queridas. Me he vuelto un místico que se compone con estabilidad y con el derecho principal a amarte. No dudo de tu buen juicio. Avanzo con capacidades que tú me otorgas. Me acerco a tu calidad, a tu distribución consentida. Me generas una dicha que me regala más y más posibilidades. Te puedo dar respuestas: las inquietudes se sienten resueltas, al tiempo que yo me veo más útil. Estoy de acuerdo con tus aportaciones, y preparo un plan que nos hará viajar.