Nuestra noche

Me meto en tus sábanas y me deleito con tu cuerpo entregándote el mío. Sueño con millones de noches que serán luces sin sombras, que se constituirán como Lunas encumbradas a Soles que endulzarán los caminos que andaremos sin dificultad alguna. Me introduzco en tus sentidos, que aglutinan los cambios con composturas que liman el tránsito hacia la paz superior. Cumplo y soy entre pedazos de algodón que señalan y que curan las heridas. Hemos aliviado el sonido y lo hemos hecho nuestro hasta decir que vale, y así es. Nos presentamos como alimentos que impresionan, y nos gustamos como pocos. No hay señales invisibles, sino símbolos que no somos capaces de ver. Nos aliñamos para el gran festín, y nos engatusamos como el primer día. Ésta es nuestra noche.